García Serrano es uno de los rostros más conocidos de Intereconomía y fiel altavoz de las consignas ultras de este grupo mediático. Fue el elegido para sustituir a Carlos Dávila al frente de La Gaceta para reconducir el diario y hacer "periodismo del siglo XXI", una tarea que se ha visto obligado a posponer por motivos de salud.

Si el carnet por puntos de tertuliano estuviera en vigor, García Serrano no podría volver a ejercer sin pasar por la facultad de Periodismo. ¿El motivo? Varias infracciones graves durante sus intervenciones en Radio Inter que le han hecho perder los 12 puntos disponibles.

Entre otras cosas se refirió a Antonio Gala como "esa maricona vieja, escritor como se diga, en los años 20 escritor de modistillas, pues esta maricona vieja, escritor de modestillas, se permitió el lujo de insultar, no sé si estaba acariciando efebos en Chueca, que es lo que le gusta verdaderamente".

No es la única muestra de homofobia de este tertuliano que sólo se escandaliza cuando los que insultan (eso en caso de que lo hayan hecho), son los demás:

"Toda esta tropa a la que llamamos la bien pagá encabezada por ese maricón que se llama Pedro Zerolo. Pues al maricón de Pedro Zerolo y toda su tropa de titiriteros les digo: un maricón como tú en Teheran estarías colgado de las grúas... con ese cuerpecito tuyo que no sabemos si es de hombre, mujero o hermafrodita, vaya usted a saber. ¡Hala! Ponte el tutú, enarbola la bandera del arcoiris y vete a manifestarte a Damasco y a Teherán".


Los últimos puntos los ha perdido por insultos sexistas y por alegrarse de que pegaran dos tiros "a ser posible de manera injusta" al etarra Txapote. También recomendó que un juez le enviara junto a la "puta de su novia" y a su "puta madre" a Guantánamo.

Esta pérdida del carnet por puntos coincide con la noticia de que la Fiscalía ha decidido imputarle por un presunto delito un delito de injurias y reclama para él una multa de 3.600 euros y una indemnización de 20.000 euros. En junio de 2010 llamó, entre otras cosas, a la entonces titular de la Conselleria de Salud de Cataluña Marina Geli, "zorra" con motivo de unos talleres de orientación sexual organizados por la Generalitat.