El caso Cerdán ha dejado al PSOE en uno de sus momentos más flacos. Que el exsecretario de Organización del partido haya sido señalado en el epicentro de la trama Koldo, junto al propio Koldo y Ábalos, también ha terminado salpicando al Gobierno, ya que desde la derecha exigen elecciones. No obstante, Sánchez rechazó, por el momento, esta posibilidad y anunció una auditoría externa y una serie de medidas acordadas junto a la Ejecutiva federal. Su decisión ha levantado ampollas también en los platós, como es el de Espejo Público. Desde allí, Mariló Montero ha asegurado que el líder socialista ha instaurado una "dictadura" y Afra Blanco ha tenido que pararle los pies.
Montero se aventuraba a compartir su reflexión: "¿Para qué quiere estar Pedro Sánchez en el poder? Es lo que quiero responderme a mí misma", arrancaba. La colaboradora hablaba entonces sobre un "autoritarismo" al que relacionaba con el presidente: "Tiene que tener en la cabeza que es que la presidencia del Gobierno es algo eventual y está haciendo que la presidencia del Gobierno sea fija y eso es muy inquietante porque eso solo es dictadura".
Las palabras de Mariló Montero indignaban a algunos de sus compañeros de sofá, especialmente a Afra Blanco: "Oye, por favor, ¿pero cómo va a ser dictadura algo que es democracia? Es que no lo entiendo". "Tenemos muchos latigazos de autoritarismo", insistía la colaboradora.
Blanco continuaba condenando el discurso de Montero: "No podemos decir que esto es una dictadura. Primero autoritarismo y luego dictadura, no se puede, Susana", le decía a la presentadora. La activista insistía en que "Pedro Sánchez está ahí, entre otras cosas, por el respaldo". "Vamos a creer que es porque a él le da la gana. No, señores y señoras, está ahí, entre otras cosas, porque hay unos socios de gobierno que lo respaldan. No lo olvidemos. En una dictadura eso no existe, pero en una democracia sí. Están ahí porque los socios de Gobierno siguen ahí. Puede que esta España no nos guste, pero es democrática", sentenciaba.
El rótulo de Telemadrid con el que intenta desprestigiar a Sánchez tras su comparecencia
Pedro Sánchez y la Ejecutiva federal del PSOE se reunían durante, aproximadamente, cinco horas, lo que provocaba que la comparecencia del presidente se retrasara hasta las 16:20 horas. Tras condenar el machismo palpable en las conversaciones entre Koldo y Cerdán, así como anunciar una serie de medidas acordadas en la reunión, Sánchez procedía a responder las cuestiones de los periodistas presentes en Ferraz.
"¿Descarta una cuestión de confianza? Y, por otra parte, ¿contempla hacer cambios en el Gobierno como ha anunciado la renovación en el partido?", le preguntaba una asistente. Sánchez respondió al instante: "Pues son muy sencillas las dos preguntas. A la primera, sí. Y a la segunda, no".
Otro de los periodistas presentes pedía el turno de palabra: "Buenas tardes, presidente. Sobre la pregunta que le ha hecho la compañera, no sé si hemos entendido bien los periodistas la segunda respuesta". Con risas de fondo, Pedro Sánchez reaccionaba de forma espontánea: "Por supuesto que sí que lo descarto. Es que ya son unas horas, no he comido y entonces… Discúlpenme". Minutos más tarde, el líder del Ejecutivo insistía en la hora para contextualizar: "Son las cinco y no he comido".
La comparecencia se estaba siguiendo en las distintas cadenas; entre ellas, Telemadrid. El equipo de Telenoticias decidía rotular con letras capitales y de gran tamaño "son las cinco y no he comido", descontextualizando las palabras de Sánchez para así tratar de desprestigiarlo.