Los detractores podrán decir que Gran Hermano es solo un programa que escasamente contribuye a la sociedad y argumentos de este estilo. Durante varias semanas, el reality show por antonomasia de Telecinco lleva evidenciando comportamientos dignos de hacer reflexionar a la audiencia. Maica Benedicto se ha convertido en un emblema para muchos, posiblemente hasta se lleve el maletín… pero su concurso debe ser una enseñanza.

Guerra (todavía más fría) desde la repesca de Ruvens

Desde la repesca de Ruvens a la casa de Guadalix de la Sierra, el ambiente es cada más tenso entre los compañeros. Pero Ruvens, no está solo, le acompaña Óscar que cuando se encuentra junto al cinéfilo deja la "cobardía" que le caracteriza para llenarse de valentía y criticar a todos los que le rodean, pero especialmente a Daniela y Maica.

Luego ambos se preguntan por qué la pareja se aíslan del resto de concursantes… cuando las burlas contra ellas son constantes. Tras la expulsión de Daniela, queda en peligro la supervivencia de Maica, no por el voto de la audiencia, sino por lo complejo de soportar el señalamiento continuo de buena parte de sus compañeros.

El ejemplo de Maica y el deber de aprender

¿Por qué decimos que el concurso de Maica debe ser una enseñanza? Como sociedad, tenemos el deber de aprender. Hace algunas semanas, Frank Blanco entonó un discurso tildado directamente de "peligroso". "Cuando hay dos personas que tienen un problema con diez, el problema debe de ser de esas dos", aseguró el colaborador en riguroso directo.

Súmate a

Apoya nuestro trabajo. Navega sin publicidad. Entra a todos los contenidos.

hazte socio

La audiencia se levantó ipso facto. "¿Y cuando todos acosan a una persona y le hacen bulylling en un colegio? Tampoco están equivocados, ¿no?", fue uno de los comentarios que resumen la ola de críticas que le llevó a pedir disculpas. Si Gran Hermano sigue bebiendo de esa esencia de experimento sociológico, la situación de Maica en la casa puede ser reflejo de incontables situaciones fuera de esas paredes.

Después de la expulsión de Daniela, Adrián puede que sea el único apoyo que tendrá Maica durante su estancia en el concurso, y esto, que ya se estaba viendo durante esta semana, ha sido objeto de varias críticas por parte de Óscar y Ruvens, que no han dudado en calificarle de "pagafantas" y "pagalejías".

Maica tendió la mano a Óscar cuando todos le daban la espalda

La inquina de Óscar contra Maica cada vez se acentúa más, piensa que no le debe nada a su examiga, lo que hace pensar que además de desleal es desagradecido. Maica fue esa persona que estuvo con Óscar al comienzo del concurso cuando la gran mayoría encabezada por Maite le acosaban, pero esto el de San Sebastián no lo recuerda. Parece ser que los días que insultaban a Óscar y Maica estaba a su lado no tienen ningún mérito y era lo que tenía que ser, a pesar de que la murciana, en ese momento, se llevaba bien con toda la casa.

Desde el grupo mayoritario en la casa, prácticamente todos salvo Maica, Daniela, Adrián o Juan, se está vendiendo una historia que, digamos presuntamente, poco tienen que ver con la realidad. Dicen que Maica trató mal a Adrián, cuando fue todo lo contrario, se trató de una historia de amor no correspondido que Laura manipuló y difundió sin tapujos. Maica estuvo semanas tratando de desmentir todo lo que se contaba, que le costó un enfrentamiento con el propio Adrián.

Maica es fuerte: ¿Aguantará dentro de una casa donde no es bienvenida?

Hacia la mitad del concurso, muchos hablan abiertamente de acoso y derribo contra Maica y Daniela. Sobre todo, en esta parte final en la que la rabia de los compañeros se centraba en el poder del Súper Big Bro que tenía Daniela, que salvaba todas las semanas a su mejor amiga. Maica es fuerte de cara a la audiencia, pues tiene un gran apoyo debido a la victimización que gracias a las burlas de los compañeros ha conseguido.

Maica se ha convertido en un ejemplo para muchos, en una persona en la que verse representados. Todos ellos pueden hacer ganadora a la natural de Cartagena, de eso no hay duda dadas las circunstancias… Lo que está en duda es cuánto podrá soportar Maica dentro de una casa en la que no es bienvenida.