La nueva campaña de Correos, No solo amarillo, lanzada el pasado jueves, en señal de apoyo al colectivo LGTBIQ+ se ha convertido en un hito histórico en la empresa de reparto.
Gracias a la viralización en redes sociales de influencers y las críticas de gente como el líder de Vox, Santiago Abascal, se ha creado una publicidad que ha movido el mensaje de la compañía estatal por toda España.
La extrema derecha criticó el enorme gasto que supondría la idea en plena crisis del coronavirus, pero no se dieron cuenta de que tal repercusión ayudaría a aumentar los ingresos.
Me pregunto por qué mi hermana (la de la foto) ha estado dos meses trabajando en el hospital sin protección si luego sobra el dinero para tunear buzones y furgos.#Prioridades pic.twitter.com/rs6iIw2iT7
— María Riesgo (@MariaRiesgo_) June 19, 2020
No hay dinero para respiradores, ni para ERTEs.
— Santiago Abascal 🇪🇸 (@Santi_ABASCAL) June 19, 2020
¡Gobierno criminal! pic.twitter.com/vQAvnNJr8M
La bandera LGTBI por muy bonita y super chachi que sea(la respeto), ni es una bandera institucional, ni es de todos. La bandera Española sí lo es.
— Bertrand Ndongo (@bertrandmyd) June 20, 2020
Una sentencia muy reciente del Supremo, prohíbe exponer banderas "NO OFICIALES EN LO PÚBLICO" y Correos es una empresa pública. https://t.co/YoqsQrEOkA
500.000 euros recaudados
Según ha informado Invertia, desde que la nueva campaña comenzara el pasado jueves se ha logrado recaudar el medio millón de euros.
Correos gastó 12.500 euros en la inversión de No solo amarillo. Y con la venta de sellos del primer día logró amortizar la cantidad invertida.
Tal gasto fue destinado para la colocación de nueve buzones de Correos con la bandera del colectivo, al igual que en cinco furgonetas de reparto y la decoración con vinilos de la oficina de Chueca.
Los 500.000 euros conseguidos podrían equivaler a 3.000 buzones vinilados, en lugar de los nueve que se han hecho.
Según señalan fuentes de la compañía a Invertia, se han vendido 15.664 unidades del sello creado con la bandera del colectivo LGTBIQ+. Lo que equivaldría a unos 18.964 euros.
Una campaña en apoyo al colectivo que ha logrado batir todos los récords a pesar de que miembros de la ultraderecha insistieran en que era un gasto innecesario.