Los indicadores que monitorizan los científicos en el volcán de La Palma, sobre todo las emisiones de dióxido de azufre, hacen pensar que el final de la erupción no se va a producir ni a corto ni a medio plazo, tal como ha informado la portavoz del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), María José Blanco. La lava ya ha cubierto 640 hectáreas, afectando a 1.541 edificaciones y desalojando a 6.400 personas.

Este miércoles se ha registrado también el terremoto de mayor envergadura de los registrados desde el inicio la erupción. El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha localizado el terremoto de magnitud 4,4 en Mazo, a una profundidad de 36 kilómetros. Fue sentido con mayor o menor intensidad en prácticamente toda la isla de La Palma. El anterior que se había registrado se localizó también en Mazo, a 35 kilómetros de profundidad y con magnitud de 4,3.

La nueva colada que avanza por el flanco norte del volcán avanza muy lentamente y cabe la posibilidad de que aborte. Esta colada está a 200 metros de la costa, pero su brazo noroeste, el que el martes atravesó en diagonal el polígono industrial del Callejón de la Gata, es el que pierde fuelle. Mientras, la que avanza más rápido lo hace a 50 metros por hora y avanza hacia el sur, siendo la que más energía y empuje acumula, tal como ha explicado Miguel Ángel Morcuende, director técnico del Pevolca.

La información que ofrecen los satélites de Copernicus indican que hay 1.541 edificaciones o construcciones afectadas, de ellas 1.408 destruidas. Aunque los datos obtenidos del catastro reducen la cifra a 937, de ellas 763 de uso residencial, 89 de uso agrario, 45 industrial, 22 de ocio y hostelería y 18 de uso público.

El final no está cerca

El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha asegurado tras la reunión del comité director del Plan Especial de Protección Civil ante Riesgo Volcánico de Canarias que aún no hay indicadores que permitan afirmar que está cerca el final de la erupción y ha destacado que en las últimas 24 horas la emisión de dióxido de azufre ha sido mayor que en los días previos.

“A día de hoy quizás la única noticia buena de este volcán es que no tenemos que lamentar ningún daño personal”, ha dicho, añadiendo que se está trabajando “de forma urgente” y haciendo en cuestión de días los esfuerzos “en los que se tardan meses” para instalar desaladoras antes de final de esta semana y solucionar los problemas en el regadío”. También ha informado que se han adquirido 18 viviendas y ya están terminados los expedientes para otras 40.

Cuarta visita de Sánchez

El presidente del Gobierno se ha trasladado por cuarta vez a la isla desde el comienzo de la erupción el pasado 19 de septiembre. En esta ocasión, Pedro Sánchez ha hecho referencia al Día de la Hispanidad y ha destacado que todos sabemos “muy bien qué representa España”. “España es un país solidario y hace 24 días estamos todos pendientes de La Palma y nos solidarizamos todos los españoles con los palmeros y las palmeras”, ha asegurado.

Asimismo, ha defendido el trabajo “codo con codo” de todas las instituciones desde el primer día de la emergencia y ha querido “poner en valor” el trabajo de los técnicos y de la “ciencia pública”, así como el realizado por las fuerzas de seguridad y “todos los cuerpos que componen este sistema nacional de Protección Civil”.