La Audiencia Nacional, que instruye el caso de la importación de 13 toneladas de cocaína en El Campello (Alicante), ha decidido sumar a la investigación a un nuevo agente que trabaja como escolta del presidente del Senado, Pedro Rollán, al considerar que podría haber incurrido en un delito de revelación de secretos tras filtrar datos de vehículos camuflados de la Policía Nacional.
La operación, que contó en su día con la colaboración de un inspector jefe que dirigía la UDEF en Madrid, pasó por el análisis del contenido de los teléfonos móviles de los ya detenidos por el caso por parte de Asuntos Internos y fue esto último lo que sacó a la luz la presunta vinculación del escolta del presidente de la Cámara Alta. Así, según se desprende de la investigación, el agente habría facilitado a un lugarteniente del jefe de la organización información sobre las matrículas de los coches camuflados de la Brigada Central de Estupefacientes de la Policía Nacional.
No obstante, al margen de lo que apuntan las pesquisas, el ahora investigado trató de justificar las acusaciones vertidas sobre él a principios de junio cuando Asuntos Internos se personó en la Comisaría Especial del Senado para recoger su declaración. En ese momento, el escolta del presidente de la Cámara Alta alegó que la consulta a las bases de datos de la policía la hizo únicamente en dos ocasiones a petición de un amigo, por lo que consideró que no estaba haciendo “nada malo”. Según la declaración prestada por el agente, este amigo, Eduardo M., que, entre otras cosas, es lugarteniente del cabecilla de la organización, Ignacio T., le pidió esta ayuda porque supuestamente habían entrado a robar a su casa y el agente le proporcionó las dos matrículas de coches que estaban próximos a la casa del amigo y que podrían estar vinculadas con el robo.
Sin embargo, el informe realizado por Asuntos Internos tumba por completo el testimonio del agente ya que confirman que esos vehículos eran coches camuflados de la Policía Nacional. De este modo, detallan que uno de ellos se encontraba junto a una nave de Eduardo M. en Fuente el Saz de Jarama, municipio donde el pasado 23 de julio de 2024 se descargó el contenedor importado desde El Campello por parte de la empresa Abadix Fruits, la entidad que meses más tarde gestionó el contenedor donde se incautaron 13.062 kilos de cocaína en Algeciras.
Por su parte, paralelo al informe de Asuntos Internos, la Brigada Central de Estupefacientes también ha llevado a cabo otra investigación sobre el contenido de los móviles intervenidos, así como intervenciones telefónicas. En esta línea, de este segundo informe se desprende que el cabecilla de la organización de narcotráfico costeó la huida de José Miguel B.C. y Vilma Janet A.B., quienes fueran dueños de la empresa de El Campello importadora del contenedor y que se entregaron a la policía en marzo. Tras ello, la mujer quedó en libertad provisional y a su marido se le concedió la prisión atenuada.
Conversaciones y datos revelados
Con todo ello, la Brigada que incautó las conversaciones ha podido conocer que el jefe de la red le informó a Eduardo M. que necesita “respirar” y que, al margen del dinero perdido por las 13 toneladas de cocaína, lleva gastadas decenas de euros para que la pareja de El Campello permanezca en silencio. Asimismo, en las conversaciones también se señala que la pareja huyó a Portugal y que, a pesar de la incautación de la droga, el vecino de El Campello quiso “continuar con la operativa”.
Cabe señalar que estas conversaciones se produjeron después de la incautación de la droga en Algeciras y antes de que la Policía procediera a la fase de explotación de la operación, con detenciones, entre las que se incluye la del exjefe de la UDEF en Madrid y su esposa. Entre otras cosas, las escuchas han destapado también el descontento de los cabecillas con la calidad de la droga incautada: “Dicen que llegaron 4.400 malos, al 75%, pero ese viejo, hijo puta, ecuatoriano, me las va a pagar”.
En la misma línea, en otra escucha uno de los participante de la conversación afirma que el “limón” -pseudónimo de José Miguel B.C.- “ha desviado millones de euros a otras cuentas de puros traquetos”, en referencia a narcotraficantes.
