Federico Jiménez Losantos acudió el pasado lunes a declarar en los juzgados de Plaza de Castilla, en Madrid, por el presunto delito de incitación al odio contra los antivacunas. El Juzgado de Instrucción número 27 de Madrid ha encontrado un posible delito de odio después de que este dijera en uno de sus programas de Es la mañana de Federico que las personas no vacunadas contra el coronavirus eran “unas ratas y unas cucarachas” a las que había que “matar y exterminar”.

Lo hace en plena guerra mediática en la derecha, tras querellarse por injurias graves contra Enrique de Diego y su medio de comunicación ultraconservador y negacionista del coronavirus Rambla Libre. Por su parte, Enrique de Diego ha presentado ante la Justicia una denuncia contra Losantos por otro presunto delito de incitación al odio.

Aunque su abogada pidió el sobreseimiento, el locutor ha sido procesado y finalmente será juzgado por lo penal, por lo que podría enfrentarse a una pena de entre uno y cuatro años de cárcel, ya que la Justicia entiende que existen “suficientes motivos de criminalidad para su imputación” tras la denuncia presentada por el abogado José Luis Mazón Costa.

Guerra con Enrique de Diego

Por el otro lado, Losantos acusa a Enrique de Diego de cometer un delito continuado de injurias graves tipificado en los artículos 208 y 209 del Código Penal, más otro de calumnias previsto en el artículo 205 del Código Penal. Así, acusa a De Diego de haber lesionado su dignidad y menoscabado su fama, razón por la que pide que castiguen estas calumnias e injurias, en caso de ser graves, con la pena de multa de seis a catorce meses de prisión.

Esto lo hizo después de haber fracasado el acto de conciliación solicitado por el locutor de esRadio, cuando fijó la responsabilidad civil en 500.000 euros. La denuncia de Losantos pone el foco en las reiteradas “expresiones” de carácter ofensivo contra su persona y Libertad Digital que se realizaron desde Rambla Libre para “lesionar su dignidad” y “atentar contra su fama”. En los últimos meses, en dicho medio se han referido a Losantos como un “enano genocida”, “demente y psicópata reprimido”, “lameculos” o “chorizo”.

Tras la denuncia recibida, Federico Jiménez Losantos ha tenido que sentarse en el banquillo acusado por un delito de odio por describir a los antivacunas con frases como “los bebelejía son organizadores criminales y de estafadores” o “la escoria hay que barrerla, la basura hay que quitarla, las ratas hay que eliminarlas, las cucarachas hay que eliminarlas, había un anuncio, no se lamente, mátelas”.

Tanto Losantos como su colaboradora Isabel San Sebastián fueron denunciados por la Asociación Liberium. Mientras el juez sobreseyó la parte de la periodista, considera que Losantos podría haber cometido un delito de odio del artículo 510 del Código Penal.

Enrique de Diego, líder antivacunas

De Diego es un excontertulio, presentador de Intereconomía y exarticulista de Libertad Digital, además de haber trabajado para ABC o Época. En la actualidad, es uno de los principales líderes antivacunas de España. El pasado mes de junio presentó “una denuncia por genocidio” exigiendo “el cese de la falsa vacunación masiva”, a la que denomina “timovacuna”.

Está muy vinculado a la extrema derecha trumpista española y, al igual que Jiménez Losantos, ha hecho del insulto y del apodo hacia sus adversarios políticos una de sus señas de identidad. Ahora, se presenta como el principal rival del locutor de esRadio. “El que insulta a un insultador tiene mil años de perdón. Su fanatismo irrestricto, su sectarismo contumaz, su megalomanía de lacayo, inconsistente, le ha nublado el juicio. Federico está acabadísimo”, aseguró en declaraciones a este medio.