Indignación absoluta por lo que hizo un sacerdote con un niño que no paraba de llorar en mitad de su bautizo. El religioso intentó calmarlo acercándolo a su pecho pero, al ver que no lo conseguía, no dudó en pegarle un buen bofetón ante la incredulidad de los familiares que se encontraban delante.

Es sólo entonces cuando se empiezan a escuchar murmullos entre los asistentes y las primeras quejas a la actuación del cura hasta que el padre interviene, pese a la resistencia del religioso, y le aleja al pequeño.

El vídeo del momento, grabado por uno de los asistentes al bautizo, ha corrido como la pólvora por internet desde que fue publicado el pasado viernes, generando gran cantidad de comentarios de indignación y cabreo.

No es la primera vez que un sacerdote propina un bofetón en mitad de una misa. Ya en 2015 se conoció el caso de un sacerdote en Brunete que dio un buen cachete a un niño que estaba haciendo la comunión.