La web Electomanía ha elaborado un curioso estudio. Se trata del nivel de simpatía entre las comunidades autónomas que conforman España, así como con sus países vecinos y algún que otro estado de la Unión Europea.

Mediante una encuesta, los responsables de la página web han pedido a los encuestados que valoren de 0 a 10 a las diferentes comunidades autónomas y países vecinos con el fin de escrutar cuál es la región que despierta más simpatía y cuál es la menos valorada por los propios españoles.

Portugal, país favorito

Pero antes de sumergirse en el nivel de amor-odio intracomunitario, se valora qué países cuentan con una visión más amable por parte de los españoles y es Portugal el que se lleva la palma, con una nota media de 8, seguido por Andorra con un 6,4. Francia es el país que cierra el podio una décima por debajo de sus vecinos.

Sin embargo, Marruecos es el país vecino que menos simpatías despierta entre los ciudadanos encuestados, por detrás de Gibraltar y Reino Unido.

¿Qué Comunidad es más querida?

Según este estudio, se ha demostrado que Asturias se lleva la palma alcanzando un 8 de valoración, aunque Galicia y País Vasco le pisan los talones. Toda la zona norte se ha ganado un hueco en el corazoncito de los ciudadanos, gracias a grandes factores que hacen de esos territorios un agradable destino a todos los niveles.  

Por contraposición, se encuentran las dos ciudades autónomas. Ceuta y Melilla obtienen una calificación media de 5,5. Pero por delante de estas se encuentra la Región de Murcia, que no ha sacado muy buena nota en este examen.

Autoevaluación

Destaca en este desglose que Ceuta es la zona que más ‘odia’ de toda España. No muchas comunidades le caen bien a la Ciudad Autónoma. Incluso ellos mismos se ponen una nota de 7,5, aunque en la autoevaluación les supera Castilla y León que se califican aún más bajos.

Mellila es la que más se quiere. Se han otorgado un 10 de nota media, pero lo que dicen los números es que el resto de España no está de acuerdo con ellos, ni de lejos. De hecho, su simpatía nacional desciende hasta el 5,5.

Madrid se autoevalúa con un 8,7. Sin embargo, la media nacional le coloca dos puntos por debajo, como ocurre con la mayoría de comunidades. La diferencia entre la valoración propia y la nacional varía ostensiblemente y oscila entre los 1,4 y 2,7, menos Castilla y León, que está cercana al 0,6.