En los últimos años, el mercado del alquiler ha presentado una subida exponencial con respecto a sus precios, teniendo en el punto de mira los dos centros nacionales más importantes del país: Madrid y Barcelona.
Al igual que en todos los sectores económicos, los alquileres se han visto muy afectados por la crisis del coronavirus, ya sea por la rescisión de múltiples contratos, que generarán deshaucios o abandonos de la vivienda. Aunque es cierto que muchos propietarios han llegado a acuerdos con sus inquilinos para hacer una rebaja en los meses de la pandemia, dado el parón al que todo el mundo tuvo que adherirse, sin remitirse a acciones legales de por medio.
Con septiembre a la vuelta de la esquina, buscar nuevo piso en Madrid es casi una cuestión de vida o muerte, por lo que, a la desesperada, mucha gente cae en las trampas de los contratos de alquiler con fallos legales que, por inexperiencia en el tema, no se suelen conocer.
Cláusulas nulas y la trampa de las fianzas
El problema reside en los depósitos que hay que facilitar al entrar a vivir en el inmueble, ya que la última modificación de la Ley de Arrendamientos Urbanos, acorde con su última modificación de 6 de marzo de 2019, sólo recoge hasta 3 meses por adelantado:
“Además de la correspondiente fianza (correspondiente a la Comunidad Autónoma) el arrendador podrá en su caso únicamente solicitar tan sólo dos mensualidades más en concepto de garantía adicional, lo que hace 3 meses en total”, asegura KLJ Abogados, expertos en derecho laboral y de arrendamiento.
Como es habitual, muchos propietarios suelen pedir como extra hasta dos meses más en forma de depósito o aval bancario. Si se da el caso de que se requieran más meses se estaría ante una cláusula nula, un elemento poco común pero que se pueden dar en un contrato aparentemente en regla.
En las páginas de búsqueda de viviendas al uso, no se encuentran estos casos como tal, sino que los involucrados esperan tener un trato más cercano con los interesados para poner sobre la mesa los requisitos reales. Mostramos un caso real que a la vista parece cumplir todos los requisitos, pero dicho inmueble requería nada más entrar un mes fianza, un mes de agencia e IVA, aval bancario de 4 meses y mes en curso; lo que hace un total de 7 meses.
Un usuario de Twitter denunció los mismos hechos en un caso similar allá por febrero, el suplemento de ‘El País’, ‘Verne’ publicó los hechos.
Los precios de Madrid siguen encarecidos
La Comunidad de Madrid lanzó una campaña de ayudas entre junio y julio para pagar dichos alquileres, datadas en 900 euros/mes durante un plazo máximo de medio año y, como era de esperar viniendo del Gobierno de Ayuso, no todos los solicitantes de la ayuda fueron beneficiados con la misma.
Respecto a la situación actual de los precios, aunque páginas como idealista o pisos.com registren estudios sobre la subida o bajada de los precios del alquiler a nivel nacional, en el caso de Madrid se ha registrado una disminución del 5% en general (según los datos de KLJ Abogados), pero la realidad no muestra variación alguna.
Las zonas que han experimentado una bajada más pronunciada en precio han sido Lavapiés-Embajadores (-15%) y Jerónimos en distrito de Retiro (-15%). Por el lado contrario, las zonas con más subidas, curiosamente, son las alejadas del centro urbano, concentrándose en Morataz (+5’4%) y San Blas (+4,1%). Así, el precio del suelo permanece en 16,3 euros/m2.
Sí es cierto que hay una oferta más amplia dada la ausencia de turistas en la capital, por lo que muchos de los pisos vacacionales se están destinando a residenciales, que en cierto modo favorece especialmente a los estudiantes. Sin embargo, se vuelven a dar precios desorbitados en comparación con los metros cuadrados que tiene la vivienda.
1.000 euros de alquiler x 20.83 euros/m2