Un hombre brasileño ha sido condenado a siete años de prisión por intentar matar a su pareja con cinco disparos. Sin embargo, durante el juicio la víctima ha sorprendido a propios y extraños al pedir permiso para besar a su agresor y afirmar que le perdonaba: “Yo lo provoqué. Nunca me había agredido, siempre fue muy bueno conmigo y ya pagó su error”.

Según informan medios brasileños, los hechos ocurrieron en Río Grande do Sul. En agosto del año pasado, Lisandro Rafael Posselt, de 28 años, agredió a su novia, Micheli Schlosser, de 25, en una heladería. La disputa comenzó después de que la víctima le recriminara que él estuviera viendo en el móvil mensajes de otras mujeres. Asimismo, le amenazó con denunciarlo por violación.

Tras este cruce de acusaciones, el hombre dejó el establecimiento para volver instantes después, esta vez armado. Ella intentó huir en un coche con otros amigos, pero este no dudó en abrir fuego contra el vehículo, disparando cinco veces, y alcanzando dos balas a la cabeza de la mujer. No obstante, milagrosamente la mujer salió ilesa.

Desde agosto del año pasado Posselt ha permanecido en prisión preventiva. Tras el reciente fallo judicial, y pese a la sentencia de siete años de prisión, este quedará en libertad puesto que cumple las dos condiciones que recoge la ley penal brasileña: no tiene antecedentes y la condena es menor a ocho años.

Asimismo, tras conocerse la sentencia, la víctima declaró al medio brasileño Gazeta so Dul que “de todos los hombres” con los que había estado, Posselt “ha sido uno de los mejores”. “No puede quejarme, no es mala persona”, añadía.

Una actitud, la de Schlosser, que ha pillado por sorpresa también al juez del caso. “Me sorprende que tenga ese deseo de mantener una relación el sujeto que le disparó cinco veces”, ha afirmado este según el diario mexicano ‘El Universal’.