Mariló Montero sorprendió en 2016 con su anuncio de que dejaba La Mañana de TVE tras siete años en el programa. La popular presentadora decidió dar un giro de 180 grados a su vida y se marchó “ a cazar sueños”, a Nueva York, donde vive su hija, la modelo Rocío Crusset. El año pasado, en el programa de Bertín Osborne, Mi casa es la tuya, contó que se dedica a “vivir, escribir, estudiar y, sobre todo, colaborar con la ONU”.

Todo esto queda reflejado en su web, que lleva su mismo nombre, en la que publica historias humanas de sus viajes por África, Oriente Medio, Asia o Latinoamérica y que también difunde en todas las cabeceras del grupo Joly, del que es consejera editorial.

Foto publicada en el blog de Mariló Montero con el comentario La mano que abrocha el hiyab es una mano pensativa

Foto publicada en el blog de Mariló Montero con el comentario: "La mano que abrocha el hiyab es una mano pensativa"

Foto difundida en el blog de Mariló Montero

Foto publicada en su blog con el comentario: "Sostener a un niño en brazos es sostener a un continente entero"

En su blog hace referencia al Fondo para los Objetivos de Desarrollo Sostenible (Fondo ODS), un mecanismo internacional de la ONU "para el desarrollo multidonante y multiagencias", según describe la web de ese organismo, creado en 2014, con una aportación económica inicial de España. 

Montero, sin embargo, sigue pendiente de la política nacional y lo demuestra en este artículo sobre las elecciones en España, al declararse admiradora de la iniciativa Abuelas por Patones, liderada por Charito, de 95 años.

Un salario de 170.000 euros en TVE

Con su salida de TVE, Mariló Montero (53 años) dejó un salario, según Voz Pópuli, de unos 170.000 euros al año, una cifra nada desdeñable, pero tal vez no tanto para la presentadora, atendiendo al saludable patrimonio que compartió con su exmarido Carlos Herrera durante su larga relación de 20 años.

La sociedad millonaria con Carlos Herrera

La pareja ha sido apoderada durante muchos años de la empresa La Rehos, S.L., dedicada a los servicios de radio, y a través de la que el presentador de la COPE ha canalizado sus beneficios, según publicó El Español, en 2017. La sociedad tiene un activo de 24,7 millones de euros, de acuerdo a su declaración de 2015.

Mariló Montero, además, fue administradora de Recreativas y Producciones Maroal S.L., una empresa que echó el cerrojo en mayo de 2018, tras acumular pérdidas de 89.000 euros, según publicó Voz Pópuli.

Su despedida de La Mañana

El 30 de junio de 2016, Montero anunciaba así su marcha de TVE: “Me siento muy orgullosa de estos 7 años, que podrían haberse alargado por deseo de TVE, que siempre me ha apoyado. Pero necesito cazar sueños que aún tengo por ahí. Gracias a TVE, gracias a mis buenos compañeros y ante todo a ustedes. Esta es mi hora de cierre, en este minuto. Por ahora, aquí concluyo mi ciclo en TVE. Salud y suerte”.

Había presentado siete temporadas de La Mañana de La 1, cadena en la que también presentó el programa El pueblo más divertido, en 2014, un experimento fallido.

Su “seducción” por la muerte

En febrero de 2017, tras su marcha de TVE, Mariló Montero reapareció en El Hormiguero, donde habló de sus viajes a Nueva York e hizo una sorprendente confesión sobre la muerte.

"Me gustaría irme con mi padre, mi madre, mi hermano, con lo que están ahí arriba... la muerte es un gran misterio, me gusta (…) A veces la muerte me produce muchísima seducción. Es fascinante. He vivido lo que tenía que vivir. Lo que me mantiene aquí son mis hijos. Por eso hay que estar muy ocupada”, afirmó.

Las reiteradas críticas por sus lapsus

Durante su etapa en La Mañana, a la presentadora le persiguieron las críticas por sus no pocos lapsus, como éste tras la muerte de la actriz Sara Montiel, en plena retransmisión en directo del traslado de sus restos mortales por el coche fúnebre, cuando la presentadora formulo la sorprendente, y obvia, pregunta de “¿qué tiene dentro?”.

Tampoco dejaron indiferentes sus afirmaciones con motivo de la muerte de Asunta, la niña asesinada en Santiago de Compostela, sobre “si acababa de ser asesinada, todavía está blandita”. Además, la presentadora dijo en otro momento que “la carta de la familia de Asunta la firma un tal Q.E.P.D”, al referirse al comunicado de la familia.

En otro programa, al referirse a una víctima de la violencia de género, Montero describió que “a la orilla del Guadalquivir es donde encontraron el cuerpo…No quiero ser explícita ni ahondar en detalles, pero la cabeza separada del cuerpo y también una de las manos amputada…”.

Sus bromas sobre un cura imputado por abusos sexuales en Borja tampoco tuvieron buen encaje. “¿No será esto, Julia, llegada la campaña de Navidad, una estrategia de promoción para el pueblo y que todos vayamos por allí?”, preguntó la presentadora a la reportera conectada con el programa desde el pueblo.

Otro de los comentarios recordados de la presentadora fue cuando dijo aquello de que quería “pasar a la prosperidad”, cuando en realidad lo que pretendía era pronunciar la palabra “posteridad”.