Luis Rubiales ha presentado su dimisión como presidente de la Real Federación Española de Fútbol y vicepresidente de la UEFA. Así lo ha dado a conocer a través de un comunicado, que ha trasladado a Pedro Rocha, presidente en funciones.

"A las 21:30 horas he transmitido al presidente en funciones, don Pedro Rocha, mi renuncia al cargo de presidente de la RFEF. También le he informado de que he hecho lo mismo con mi cargo en UEFA para que mi puesto en la Vicepresidencia pueda ser sustituido", explica Rubiales, que había sido apartado cautelarmente de su cargo por la FIFA tras el beso forzado a Jennifer Hermoso. 

Rubiales justifica su decisión apuntando que "tras la veloz suspensión realizada por FIFA, más el resto de procedimientos abiertos contra mi persona, es evidente que no podré vovler a mi cargo". "Isistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo", apunta, señalando que "hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta". 

Asimismo, destaca que no quiere que el fútbol español "se vea perjudicado por esta campaña tan desproporcionada" y precisa que su decisión obedece a la intención de que Europa y África sigan unidas en "el sueño de 2023". 

Rubiales afirma que tiene "fe en la verdad" e insiste en que va a "hacer todo lo que esté en mi mano para que prevalezca" y a continuación asegura que sus hijas, su familia y la gente que le quiere "han sufrido los efectos de una persecución desmedida, así como muchas falsedades". 

Las últimas líneas de su comunicado están dedicadas a los agredecimientos a muchos de quienes les han acompañado en los últimos años y a quienes le han apoyado en estos momentos, 

El comunicado completo

Comunicado de dimisión de Luis Rubiales

La denuncia de Jennifer Hermoso

Cabe recordar que la futbolista presentó esta misma semana una denuncia contra Rubiales por el beso recibido sin consentimiento durante la celebración de la final del mundial. Del mismo modo, la Fiscalía también ha avanzado que "presentará una querella a la mayor brevedad posible" contra el hasta hoy máximo dirigente del fútbol español.

De hecho, la jugadora presentó la demanda después de que, desde la Fiscalía le ofrecieran acciones tras abrir unas Diligencias de Investigación Preproceles. En este caso, el de los delitos contra la indemnidad sexual, es necesaria la denuncia de la víctima, ya que es lo que se conoce como delito semiprivado, pues el fiscal no puede ejercer la acusación si la persona afectada no ha interpuesto la citada denuncia. Es más, el Ministerio Público solo puede actuar de oficio en los supuestos que afectan a menores de edad, personas con discapacidad o personas especialmente vulnerables. Esto viene recogido en el artículo 191.1 Código Penal que establece que “para proceder por los delitos de agresiones, acoso o abusos sexuales, será precisa denuncia de la persona agraviada, de su representante legal o querella del Ministerio Fiscal, que actuará ponderando los legítimos intereses en presencia".

El delito de agresión sexual

El delito de agresión sexual previsto en el artículo 178 establece que: "Será castigado con la pena de prisión de uno a cuatro años, como responsable de agresión sexual, el que realice cualquier acto que atente contra la libertad sexual de otra persona sin su consentimiento. Sólo se entenderá que hay consentimiento cuando se haya manifestado libremente mediante actos que, en atención a las circunstancias del caso, expresen de manera clara la voluntad de la persona".

La repercusión de lo sucedido ha adquirido tal magnitud, no solo por lo reprochable, machista e indecente que fue el beso no cosentido, sino por la oleada de de apoyo a la jugadora que ha generado el asunto Rubiales. De hecho, Nevenka Fernández, la primera mujer en España en conseguir una condena por acoso sexual, está entre quienes se han pronunciado sobre el ‘caso Rubiales’.

Tal y como adelantó el martes Newtral, Nevenka escribió una carta abierta dirigida a Jennifer Hermoso tras la polémica, haciéndole saber de su empatía y poniendo en valor su valentía por condenar los hechos. “Toda mi admiración para ti, Jenni Hermoso, por tu valentía, y para todas tus compañeras por apoyarte desde el primer día, eso también requiere mucho valor e integridad. Estos días he sentido mucha empatía y deseaba enviaron un poco de luz”, comenzaba diciendo su escrito.

Tras estas palabras, Nevenka Fernández celebraba que “hay una España que ha comprendido que no podemos continuar diciendo que está bien lo que está mal”, en referencia al beso no consentido que ha desatado un arduo debate en sobre la igualdad en el mundo deportivo, tanto a nivel nacional como internacional. “No podemos continuar mirando de lado o al lado contrario, señalando a las víctimas en vez de a los que abusan, y en esa España, en realidad, de la que nunca me fui, hay un montón de gente que ha gritado y seguirá gritando que no estáis solas”, señalaba, en alusión así a las sendas manifestaciones feministas que se han convocado desde entonces en distintos puntos del país en señal de repulsa al comportamiento del ejecutivo futbolístico.

“Es vergonzoso -y seguirá siéndolo- observar a los que con sus gestos, palabras y silencios ensalzan y defiende el machismo más rancio e ignorante,ese sexismo estructural tan difícil de explicar con palabras pero que todos reconocemos, ese que estos días hemos visto y que seguiremos viendo, que quiere seguir revictimizándonos y callándonos, y que, para hacerlo, continuará cayendo tan bajo como sea necesario”, finalizaba argumentando en su carta.