La Guardia Civil ha sido agredida por cientos de inmigrantes irregulares en la frontera entre Ceuta y Marruecos después de que este lunes más de 5.000 personas cruzaran el límite fronterizo y entraran de forma ilegal en Europa.

Los cuerpos y fuerzas de seguridad han acudido esta mañana, junto al ejército, para proteger la zona y evitar la llegada masiva de más de inmigrantes que se encuentran, en estos momentos, en suelo marroquí.

Ante la presencia de la Guardia Civil, cientos de personas han cogido piedras y no han dudado en lanzarlas contra los cuerpos de seguridad, con el fin de debilitarles y tratar de pasar la frontera.

El Gobierno español ha decidido movilizar al Ejército, concretamente a las unidades de La Legión y Regulares, para reforzar a las fuerzas de seguridad en el control de la ciudad.

La Delegación del Gobierno ha elevado cerca de la medianoche a "unos 5.000" el número de ciudadanos marroquíes que han accedido irregularmente a la ciudad autónoma durante este lunes bordeando los espigones marítimos del Tarajal y Benzú.

Según la institución, alrededor de 1.500 serían menores de edad, por lo que no podrán ser expulsados de forma expeditiva, como las autoridades españolas esperan poder pactar con Marruecos igual que tras la crisis del último fin de semana de abril, cuando algo más de un centenar de jóvenes súbditos del país vecino entró en territorio español por la misma vía.