El comisario José Manuel Villarejo ha revelado en su declaración ante el juez Arturo Zamarriego, que dirige la investigación del caso pequeño Nicolás, su estrecha relación con los periodistas Eduardo Inda y Estaban Urrieztieta, revelada ya en el sumario de la causa y a través de la que, durante tres meses de finales de 2014, se ejecutó una campaña contra los independentistas catalanes, contra Podemos y contra el ex jefe de la Unidad de Asuntos Internos, Marcelino Martín-Blas.
Según recoge este viernes el diario Público, Villarejo declaró ante el juez que “siempre ha tenido relación con periodistas”, pero que especialmente con estos dos que le “han sido de ayuda en algunos trabajos”. Durante la fase de instrucción del caso también se llegó a pedir el registro “por la fuerza” de la casa de Inda,
Informaciones contra los 'enemigos' del PP
Sólo entre octubre de 2014 y enero de 2015, Inda y Urrieztieta publicaron tres informaciones que luego han sido tachadas de falsas por la justicia: la supuesta cuenta del entonces alcalde de Barcelona, Xavier Trias, el informe conocido como PISA (Pablo Iglesias Sociedad Anónima) y una grabación que, según estos periodistas, probaba que el CNI y el comisario Martín-Blas estaban manipulando pruebas en contra del pequeño Nicolás.
Más de 200 llamadas
El sumario de la pieza separada que investiga la revelación de secretos por parte de la cúpula policial para dañar a otras instituciones y ayudar al pequeño Nicolás recoge que se cruzaron más de 200 llamadas entre Inda y Urrieztieta con agentes de la policía involucrados.
La Operación Cataluña
Este mismo miércoles se conocía también que el comisario Villarejo había revelado en su declaración la existencia de la Operación Cataluña, una unidad secreta de la Policía que investigaría a aquellos políticos que trabajan para conseguir que el proceso separatista sea una realidad.
Estas revelaciones durante la declaración ante el juez se suman a las muchas del caso que hemos ido conociendo durante la fase de instrucción como la investigación de las grabaciones en las que se podría oír a agentes de la policía y del CNI acordando la supuesta fabricación de pruebas falsas para el caso de ‘El Pequeño Nicolás'.
Después de que se pidiera, incluso, el registro “por la fuerza” de la casa de periodistas como Eduardo Inda, después de que hablaran de enfrentamientos internos entre altos cargos y comisarios de la Policía