Todo pintaba bien, cuando el cardenal obispo de Madrid, Carlos Osoro, dio su apoyo a la huelga feminista del 8 de marzo, con el argumento de que hasta “la Virgen lo haría”. Pero tuvo que venir José Ignacio Munilla, obispo de San Sebastián para recordar las viejas posiciones de los obispos, al asegurar que “el demonio” está dentro del “feminismo radical o de género”.

Según explicó este lunes Munilla en Radio María, hay dos feminismos: “el femenino”, que busca la igualdad jurídica y legal de hombres y mujeres, y uno “radical o de género” que quiere equiparar a los dos sexos en todos los aspectos.

Este segundo tiene “como como "víctima a la propia mujer y a la verdadera causa femenina". "Es curioso cómo el demonio puede meter un gol desde las propias filas. El feminismo, al haber asumido la ideología de género, se ha hecho una especie de hara kiri”, llegó a decir.

Según Munilla, el feminismo defiende causas como “el lesbianismo y el bisexualismo” y “el aborto libre y gratuito”, que ha supuesto un “genocidio femenino” en muchos lugares del mundo donde se utiliza para que no nazcan mujeres.

Munilla ha señalado que "existe un problema de fondo, el abuso hacia la mujer existe, existe un abuso que nace desde una concepción machista, en la que ese abuso de la fuerza y del poder por parte del hombre o de ciertos hombres, se convierte en un pecado contra la mujer". Pero asegura que el machismo no surge “a nivel racional” sino a “nivel animal”. "Ahí se generan relaciones machistas, basadas en la ley del más fuerte", ha argumentado.

Y ha pintado al cristianismo como un servidor de “la dignidad de la mujer” porque defiende la “monogamia” y rechaza el divorcio”. "El hecho de que alguien pueda tener cinco mujeres reduce a la mujer a una condición casi de objeto", ha dicho.