El parque de atracciones de Disneyland en Shanghái ha anunciado este viernes, el primer día de las vacaciones del Año Nuevo chino, que permanecerá cerrado hasta nueva orden debido a la propagación del coronavirus, que ya ha contaminado a más de 800 personas en China. Este virus surgió en el mercado de pescado y marisco de Wuhan y parece haberse transmitido de animales a humanos.

Según ha informado Shanghài Disney en su página web, ha tomado la decisión "con fines preventivos y de control de la epidemia y para preservar la salud" de sus clientes y trabajadores.

No es el único sitio que cierra debido a la propagación del coronavirus, algunas zonas de la Gran Muralla china cerrarán al público este sábado también como medida preventiva, según adelanta China Daily. Este dato ha sido facilitado por los medios de comunicación estatales y la oficina del Gobierno de Pekín que gestiona la parte de Badaling, que se corresponde a una de las zonas de la Muralla china a la que acuden más turistas habitualmente.

McDonald's también echa el cierre

Por su parte, la cadena de comida McDonald's ha decidido suspender todos sus servicios en cinco ciudades de la provincia de Hubei, en China, la más afectada por el brote del coronavirus que ya ha matado a 26 personas y contagiado a más de 800 personas.

La Organización Mundial de la Salud asegura que las medidas tomadas por el Gobierno chino son suficientes y descarta, de momento, declarar la alerta a nivel internacional. Entre las medidas en las que ya trabaja el Gobierno de la República Popular está la construcción en tiempo récord de un nuevo hospital para trasladar a los afectados. Se prevé que estará operativo el 3 de febrero.

Aproximadamente 40 millones de personas de 13 ciudades de la provincia de Hubei están confinadas sin poder utilizar el transporte público ni poder salir de sus localidades. Mientras, a la cancelación de los actos con motivo del Año Nuevo se han sumado en las últimas horas la clausura de importantes emplazamientos turísticos.