El norte, su cotidianidad, sus códigos. Si aterrizamos en Santander, empiezan rápidamente a venirnos a la mente aromas, colores y sonidos que la distinguen, y fruto de unas condiciones tan particulares es la música de Eykeyey Rey. José Luis (1982, Santander) ha charlado un rato con ElPlural.com para desgranar 'Gurugú Gurugú', su más reciente trabajo, y sus referencias, orígenes e influencias más marcadas. 'Gurugú Gurugú' es un EP de cinco cortes de rap que puede resumirse a la perfección con una de las frases de la Intro: 'Da igual si es verano, sonamos a invierno, puto'. Sonido crudo, oscuro, con toda la esencia underground de atmósfera grisácea que uno pueda buscar y esperar. El tracklist cuenta con la participación de BOBYZ, Chopstikzz y CUPKA.

Pregunta (P): Lo primero de todo, ¿cómo te llamo?

Respuesta: (R): Me llamo José Luis, pero me puedes llamar Rey o como quieras (risas).

P: Vamos a hablar de tu último trabajo, 'Gurugú Gurugú'. ¿De dónde surge el nombre del proyecto y su concepto?

R: El nombre es básicamente el nombre de mi barrio, en Santander, que es donde he vivido la mayor parte de mi vida. En cuanto al concepto, cuando volví a hacer música, hace unos dos años, encontramos un sonido nuevo que nos gustó y empezamos con el vacile de Gurugú Gurugú, y ese fue el nombre que le pusimos. No tiene mayor misterio.

P: En cuanto a la dirección artística del proyecto, percibo que todo es muy oriundo. Fotos por el barrio, en una galería de alimentación, todo en blanco y negro. Muy cercano, tangible, reconocible. 

R: Sí. La foto de portada del EP es en el mercado de mi barrio, y creo que toda la atmósfera del proyecto está atada a lo que son mis raíces y a mi día a día.

P: Me gustaría que me dijeras cómo han influido tus orígenes, en Santander, en tu música. 

R: Santander, aunque está cambiando un poco el tiempo con el cambio climático, es una ciudad muy del norte, oscura, llueve mucho. Y eso influye en la música, evidentemente. No sólo en la mía, sino que en otros referentes como Chinatown también se notaba. La música de Santander suele ser oscura, y creo que la mía también lo es.

Mi estilo siempre fue especial, es por amor al hip hop, no es para triunfar

 

P: Sobre la escena musical cántabra y de Santander más en concreto, ¿cómo definirías el panorama actual e histórico? Existe cierta escuela en la región que igual ha pasado inadvertida para el gran público.

R: Aquí se ha creado una escena bastante guapa, a pesar de que es una ciudad pequeña que está lejos de Madrid y de las otras grandes ciudades. Ya desde hace mucho hay una escena con un estilo muy característico y definido. Yo, desde antaño, si escuchaba un grupo de rap o un rapero, perfectamente podía saber si era de Santander, de Zaragoza, de Sevilla o de Madrid, porque cada zona tenía su estilo propio, sus maneras. Para nosotros, lo de aquí era lo más parecido al rap que escuchábamos, que era el estadounidense, especialmente toda la movida de Nueva York de los años 90.

P: En cuanto a artistas extranjeros, ¿qué nombres consideras que han podido ser influyentes en tu obra?

R: Me nutro un poco de todo. Fuera del hip hop, principalmente te diría que Michael Jackson fue importante para mí cuando era pequeño. Dentro del hip hop, en cuanto a influencias y sin ser mucho de idolatrar a nadie, nombraría a Biggie, Wu-Tang Clan, Nas, Big Pun, Fat Joe, todo el rollo de Queens… eso en mi primera época. Ahora que soy más mayorcito, me vino muy bien descubrir sonidos nuevos en gente como Roc Marciano, Westside Gunn, Griselda, Action Bronson, Tha God Fahim, Boldy James y toda esa ola, es lo que más me ha inspirado.

Rap. Básico. Cojo un beat y me subo en él

 

P: Háblame de tu proceso creativo, desde que tienes una idea, hasta que la ejecutas, hasta que llegas al resultado final. ¿Cómo llegas hasta ahí?

R: Te diría que es básico. Rap. Cojo un beat y me subo en él. Siempre empiezo por un beat, me lo pongo, lo escucho y lo que me diga. Me pruebo a rapear encima, y enseguida sé si me dice algo o no, si me surge alguna palabra o algún concepto del que ir tirando. Incluso hay muchos beats que me parecen buenos, pero no me sacan lo que necesito para inspirarme. A mí lo que me tiene que pasar con un beat es que lo oiga, y ya desde el primer momento saber por dónde voy a tirar. Es una cuestión de sensaciones. Hay beats que sé que son buenos, que incluso otras personas se harían o se han hecho temas muy guapos en ellos, pero no son para mí.

P: Con este nuevo proyecto, ¿cuáles dirías que son los objetivos o expectativas que te has puesto? Cuando lo estabas haciendo y cuando llegó el momento de publicarlo, ¿qué metas tuviste?

R: Ten en cuenta que tengo ya casi 42 años, y cuando volví a hacer música, que tenía 40, volví con la única idea de hacer lo que me gusta y de disfrutar. No tengo ganas ni de correr, ni de competir, ni de tratar de estar ahí pisando a nadie. Solo tengo ganas de hacer música y de pasármelo bien haciéndola. Luego, claro, siempre hay gente que la escucha, y si tiene repercusión, pues estupendo. Pero tampoco tengo pretensiones de nada. Solo quiero disfrutar de hacer música y hacer bolos, aunque para eso, claro, hay que tener cierta repercusión. Quiero disfrutar, no quiero estresarme para nada con esto. Diría que esa es mi meta.

Síguenos en Whatsapp y recibe las noticias destacadas y las historias más interesantes.