A Emilia Pardo Bazán se le atragantó la Academia, que nunca llegó a admitirla y hasta en tres ocasiones la rechazó. Sin embargo, eso que llamamos “justicia poética” (y aquí más si cabe) ha jugado sus cartas y le ha devuelto a esa Academia el golpe, situando a la gallega como una de las grandes escritoras de la literatura española y demostrando que la naftalina de ciertas instituciones no es garante de calidad y reconocimiento. Es esta la RAE que no admite el lenguaje no sexista porque dice que el masculino es genérico y es la Academia que dejó fuera a Pardo Bazán. Hechos son amores…

Nórdica Libros publica ahora 'La cita y otros cuentos de terror', con ilustraciones de Elena Ferrándiz y prólogo de Care Santos, y le da otra vuelta de tuerca a una Bazán heterogénea, capaz de escribir pequeños relatos con un final sorprendente (llegó a escribir más de cuatrocientos cuentos) y donde el suspense y la sorpresa final es el tono de cada capítulo.

Care Santos selecciona diez cuentos de terror que fueron publicados en las revistas más prestigiosas del momento y donde, además de la trama principal, deja aflorar una crítica social a las desigualdades de la época. La fama de Pardo Bazán no la libró tampoco de los comentarios machistas sobre su persona. Así, en el prólogo, Santos refiere el comentario que Leopoldo Alas, Clarín hace sobre su intento de ser académica (y que refleja la opinión no exclusiva del escritor ovetense):

«¿Por qué quiere doña Emilia ser académica [...] ¿cómo quiere que sus verdaderos amigos le alabemos esa manía? Más vale que fume. ¿Ser académica? ¿Para qué? Es como si se empeñara en ser guardia civila (sic) o de la policía secreta».

Irreverente, libre, crítica y mordaz, Pardo Bazán no dejó de contestarle a Clarín y a todos los que, como él, la defendían como escritora pero a medias tintas (escritora pero no mucho), alentados por una misoginia invisible e implacable:

“Si a título de ambición personal no debo insistir ni postular para la Academia, en nombre de mi sexo creo que hasta tengo el deber de sostener, en el terreno platónico, y sin intrigas ni complots, la aptitud legal de las mujeres que lo merezcan para sentarse en aquel sillón, mientras haya Academias en el mundo”.

Lo cierto es que la figura poliédrica de Pardo Bazán, pionera en su tiempo, la llevó a convertirse en novelista, poeta, periodista, traductora, crítica literaria, editora, catedrática universitaria, conferenciante... e introdujo el naturalismo francés en España. Con estos diez cuentos de terror nos sumergimos en la Bazán más misteriosa.  Como dice Care Santos “si nunca la leyeron antes, les envidio. Están a punto de darse un auténtico festín de magnífica literatura”.

Mientras haya Academias en el mundo, seguiremos reivindicando a Pardo Bazán y a todas las que se quedaron fuera, por eso estos cuentos son también una forma de homenaje en todas sus facetas.