Generalmente al mencionar el término dieta lo primero que se viene a la mente es la ardua tarea de perder peso, pero son muchas las personas de constitución ectomórfica que desean exactamente lo contrario, es decir, engordar sin que ello afecte negativamente a su estado de salud. Conseguirlo es verdaderamente difícil debido a que dicho somatotipo de delgadez se caracteriza por requerir diariamente muchas kilocalorías ingeridas con tal de que las mismas superen la cifra de energía consumida, aunque es posible lograrlo aplicando una serie de consejos que se basan principalmente en seguir a rajatabla una dieta.

Lo primero que ha de tenerse en cuenta es que un ectomorfo necesita bastante tiempo para que el peso aumente sustancialmente siempre y cuando quiera hacerse saludablemente. Es por ello que algunos sujetos pueden verse frustrados al ver que los resultados se demoran tanto en hacerse visibles, pero lo cierto es que manteniendo la rutina los kilos van aumentando muy paulatinamente. Para tal fin es esencial seguir una dieta para ganar peso que se centra en ingerir más calorías de las que consumes, la cual puedes encontrar en dietassanas.org junto a otras propuestas alimenticias. La dificultad viene dada por el factor de que el somatotipo ectomórfico presenta un metabolismo acelerado ocasionando que el individuo gaste a diario una gran cantidad de kilocalorías, por lo que si el número de las mismas no es superado al comer resulta imposible aumentar de peso. Debido a dicho motivo las personas que sufren de este tipo de delgadez se ven obligadas a ingerir muchos alimentos a lo largo de la semana.

Si eres ectomorfo y das por imposible la difícil tarea de proporcionarle a tu cuerpo la energía que necesita cada día puedes optar por llevar una dieta sana con alimentos hipercalóricos que también suponen una mejora para tu salud gracias a los beneficios que aportan: frutos secos, miel, avena, aceite, etcétera. Éste último conviene añadirlo a las comidas, siempre y cuando sea de calidad como el aceite de oliva virgen extra, con tal de sumar una serie de calorías extra a los platos que a lo largo de la semana pueden suponer la diferencia entre simplemente mantener el peso o, por el contrario, comenzar a ganar kilos. Para ello no basta con comer mucho sin pensar, sino que conviene saber exactamente qué tipos de alimentos ofrecen una mayor cantidad de kilocalorías sin que sacien demasiado a la persona que los ingiere. Algunos de ellos como la avena y el plátano pueden combinarse en sabrosos batidos.

Los consejos dietéticos mencionados hasta ahora son ideales no solo para personas de somatotipo ectomórfico, sino también para cualquier individuo que esté en fase de volumen para ganar músculo. En los dos casos no tiene por qué evitarse la realización de actividad cardiovascular como salir a correr, hecho que es recomendado en ocasiones para que el cuerpo no consuma tantísima energía que posteriormente costará demasiado recuperarla. Lo cierto es que llevar a cabo este tipo de ejercicios con una relativa frecuencia te ayudará a gozar de una exquisita vitalidad, así que puedes efectuarlos todas las veces que quieras asumiendo que el día que hagas cardio deberás modificar las cantidades de la dieta para que la energía ingerida siga siendo superior a la consumida por la actividad.

Aquellos ejercicios que no acostumbran a acarrear tanto déficit calórico son los que consisten en ganar masa muscular, otro proceso que exige muchísimo sacrificio a cualquier ectomorfo. Realizando abdominales en un banco, levantamientos de pesas y otras actividades disfrutables tanto en un gimnasio como en tu propia casa conseguirás incrementar el tamaño de tus músculos a largo plazo sin que durante el proceso quemes tantas calorías como con la actividad cardiovascular. Aunque el consumo de energía es menor debes asumir que el metabolismo acelerado provoca que el déficit de calorías siga siendo muy probable, teniendo que compensarlo a través de una dieta saludable aplicada con regularidad.

Es importante el hecho de tener en cuenta que para un ectomorfo no se acaban sus problemas de delgadez únicamente con la acción de comer mucho, puesto que ello no soluciona algunos contratiempos relacionados con la apariencia física y que suelen pasarles factura psicológica a las personas que cuentan con este somatotipo: muñecas de escasa anchura, costillas marcadas en el abdomen, etcétera. Para paliarlos es fundamental llevar a cabo la actividad muscular anteriormente mencionada, siendo un claro ejemplo las sentadillas que logran ensanchar las delgadas piernas tan características de los individuos ectomórficos.

Por otra parte, reducir al máximo el estrés resulta fundamental en un sujeto de dicho somatotipo, ya que este estado provoca si cabe un mayor consumo de calorías que se traduce en la obligatoriedad de aumentar las ya de por sí elevadísimas cantidades de alimentos que diariamente han de ser ingeridos. Sin ningún tipo de duda se trata de uno de los consejos más difíciles de aplicar debido a que no depende únicamente de la persona que trata de acabar con las situaciones estresantes.