La Universidad de Oxford ha informado de un nuevo ensayo clínico realizado en el Reino Unido con 2.000 pacientes que demuestra que el combinado de la dexametasona y el tocilizumab evita la muerte de uno de cada 25 pacientes tratados de coronavirus y en los casos más graves, la tasa de mortalidad disminuye un 50%. En los pacientes que sólo necesitan oxígeno con mascarilla, la reducción de la mortalidad es de un 30%. 

Lo investigadores ya habían probado la eficacia de ambos fármacos por separado, pero ahora han visto que es mucho mayor combinadas para reducir la mortalidad de pacientes, que se reduce, en general, en cuatro puntos (del 33% al 29%).

Uno de los medicamentos cuesta 1.000 euros

La dexametasona es un medicamento antiinflamatorio muy conocido y barato, pero el tocilizumab es un fármaco nuevo que ahora se usa en los hospitales para tratar la artritis y cuesta unos 1.000 euros por tratamiento, aunque puede ahorrar más de 28.000 euros al reducir el tiempo que el paciente tiene que estar ingresado en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

Según Peter Horby, profesor de Enfermedades Infecciosas Emergentes de la Universidad de Oxford, los grandes beneficios de la combinación de estos dos fármacos ayudan, "sobre todo, a los enfermos con niveles bajos de oxígeno y lo que ya sufren una inflamación avanzada". Pero los beneficios de esta nueva terapia combinada también se ha demostrado en los pacientes menos graves, porque solo necesitan un suministro extra de oxígeno a través de una mascarilla.

Muy útil ante la inflamación de los pulmones

La combinación de estos dos fármacos funciona muy bien, además, en la etapa del coronavirus donde más se necesita un tratamiento eficaz, es decir, cuando el sistema inmunológico del propio paciente reacciona de forma exagerada al virus provocando un grave inflamación de los pulmones, que, en muchos casos, acaba con la muerte.

La dexametasona y el tocilizumab son los primeros medicamentos que han demostrado salvar vidas en el caso de la Covid-19. Martin Landray, profesor de en la Universidad de Oxford, ha dicho que el estudio "muestra claramente los beneficios del tocilizumab y la dexametasona para abordar las peores consecuencias del coronavirus: mejorar la supervivencia, acortar la estancia hospitalaria y reducir la necesidad de ventiladores mecánicos".

La Universidad de Oxford ha anunciado que los resultados de este estudio se publicarán próximamente en una revista científica.