Los colutorios bucales pueden servir para hacer frente a la gripe y otros virus respiratorios

La gripe se ha adelantado este año, con una variante más resistente a las vacunas y con mayor capacidad de contagio, situándose ya por encima de los 600 casos por cada 100.000 habitantes, según el Sistema de Vigilancia de Infección Respiratoria Aguda. 

La Comunidad de Madrid y Cataluña han superado los picos epidémicos de los últimos tres años, alcanzando cifras de hasta 2.757 y 4.188 casos por cada 100.000 habitantes. Sin embargo, el de la gripe no es el único virus en circulación, pues también crecen los contagios por SARS-CoV-2 y el virus respiratorio sincitial (VRS), sobre todo, en la población pediátrica.

Para hacer frente a esta situación y evitar el colapso de los sistemas sanitarios, muy tensionados ya, el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas han activado un protocolo común que incluye recomendaciones como el uso de mascarilla en personas con síntomas, su obligatoriedad en centros sanitarios, la promoción del teletrabajo y la vacunación antigripal y contra la COVID-19 para grupos de riesgo.

Para prevenir el contagio, se recomienda evitar aglomeraciones, ventilar los espacios y una higiene adecuada de manos. No obstante, hay otra precaución que se puede adoptar y que, según distintos estudios, puede resultar efectiva para hacer frente a los virus respiratorios, los enjuagues bucales que contienen cloruro de cetilpiridinio (CPC) y/o clorhexidina (CHX). 

Diferentes investigaciones han demostrado que algunos de estos productos presentan una actividad antiviral significativa frente a la gripe, el VRS y el SARS-CoV-2, lo que los convierte en buenos aliados para prevenir y transmitir la infección. Hay que tener en cuenta que la boca constituye una puerta de entrada esencial para los virus respiratorios y un lugar donde pueden replicarse, además de ser origen de aerosoles que facilitan su transmisión

Un estudio publicado en PLOS ONE bajo el título 'Cetylpyridinium chloride and chlorhexidine show antiviral activity against Influenza A virus and Respiratory Syncytial virus in vitro', apunta que el CPC y la CHX reducen la infectividad del virus de la gripe (Influenza A) y del virus respiratorio sincitial (VRS) en ensayos in vitro, con reducciones de infectividad de entre el 90 y el 99,9%, según la concentración. 

En una línea similar apuntaron ya otras investigaciones anteriores como Cetylpyridinium Chloride-Containing Mouthwashes Show Virucidal Activity against Herpes Simplex Virus Type 1, que, mediante ensayos in vitro con colutorios comerciales que contenían CPC, demostró actividad virucida frente a virus con envoltura como HSV-1 (no frente a virus no-envoltura como HPV). Los autores concluyeron que los colutorios con CPC pueden representar una medida coste-efectiva para limitar la infección y la transmisión de virus envueltos en la cavidad oral.

De igual modo, en 'Preprocedural Mouthwashes for Reduction of SARS-CoV-2 Viral Load and Infectivity', los investigadores revisaron la evidencia disponible sobre los enjuagues preprocedimentales para reducir la carga/infectividad de SARS-CoV-2, y apuntaron la utilidad potencial de incluir colutorios como parte de las medidas de control de infecciones en la consulta dental. No obstante también señalaron la necesidad de mayor evidencia clínica de alta calidad.

"En la clínica dental, la boca es el centro de atención y una de las principales vías de entrada para virus y bacterias", expone Gabriela Bacchini, Directora Médica de Dentaid, que apunta que, por ello, "contar con medidas adicionales que refuercen la seguridad es clave". Así, recuerda que "la evidencia científica demuestra que los enjuagues bucales pueden ser una herramienta eficaz para proteger, tanto a los pacientes, como a los profesionales durante los tratamientos”. 

Incorporar este tipo de productos a la rutina diaria, por tanto, puede contribuir a disminuir la carga viral en la cavidad oral y, en consecuencia, reducir la propagación de las infecciones respiratorias.