Este viernes se conmemoró el Día internacional para la Erradicación de la pobreza, una fecha que la Plataforma de Mayores y Pensionistas (PMP) ha aprovechado para reclamar la implantación de forma urgente de políticas de justicia intergeneracional que permitan erradicar la persistencia en nuestro país de las altas tasas de pobreza y exclusión social que afectan a los mayores de 65 años.
Según datos de la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) del Instituto Nacional de Estadística correspondientes a 2024, la tasa AROPE (personas en riesgo de pobreza o exclusión social) en esta franja de edad se situó en el 19,5 %, lo que supone que casi uno de cada cinco mayores está en riesgo de pobreza o exclusión social.
Las cifras del Centro Internacional sobre el Envejecimiento (CENIE) no son más alentadoras, pues evidencian desequilibrios aún mayores en las mujeres con pensiones de viudedad o pensiones bajas. De hecho, aproximadamente tres de cada diez mujeres con derecho a pensión, perciben la cantidad mínima.
Sin calefacción para llegar a fin de mes
La Plataforma de Mayores y Pensionistas advierte también del creciente impacto de la pobreza energética, que afecta, sobre todo, a mayores que viven solos y dependen de pensiones mínimas o de viudedad, comprometiendo de modo directo su bienestar y dignidad.
Así lo refleja el informe ‘Indicadores de Pobreza Energética 2022-2024, balance y cierre ENPE 19-24’, elaborado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que señala también que la mayoría de personas mayores afirman no poder calentar adecuadamente su vivienda, o se retrasan en el pago de los suministros esenciales.
“Cada dato tiene rostro y nombre: personas mayores que enfrentan el invierno con mantas o apagando la calefacción para llegar a fin de mes", advierte Jesús Norberto Fernández, presidente de la PMP, que destaca que "no hay bienestar posible mientras persista esta forma de desigualdad”.
En este contexto, esta entidad hace cinco peticiones:
- Revalorizar de forma sostenida de las pensiones para asegurar el poder adquisitivo frente a la inflación y cubrir los gastos básicos.
- Mejorar el complemento de las pensiones mínimas hasta equipararlas al nivel del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) vigente. Según datos de la Seguridad Social, en la actualidad casi un 60% de los pensionistas percibe una retribución inferior al SMI. La Plataforma defiende que debe garantizarse que ninguna persona jubilada o pensionista perciba ingresos por debajo de ese salario, de manera que las todas las pensiones estén por encima del umbral de la pobreza y aseguren un nivel de vida digno.
- Reforzar el bono social energético, así como las medidas específicas contra la pobreza energética de los mayores.
- Mejorar los programas de atención domiciliaria y prevención de soledad. al igual que las campañas frente a fenómenos climáticos extremos, poniendo el foco en los mayores que viven solos.
- Apoyar y promocionar la rehabilitación y mejora de la eficiencia energética en viviendas antiguas.
Por último, desde la Plataforma de Mayores y Pensionistas lamentan el "falso conflicto generacional” que defienden algunos y que busca contraponer las condiciones de las personas mayores frente a las de la juventud, recordando que la pobreza afecta a todas las edades, aunque sus manifestaciones sean distintas.
"No hay conflicto entre generaciones, hay desigualdad entre quienes tienen recursos y quienes no”, enfatiza Fernández, que insiste en que “las personas mayores no compiten con los jóvenes". "Compartimos la misma lucha por un futuro más justo y solidario”, destaca, al tiempo que indica que la erradicación de la pobreza “solo será posible si todas las generaciones caminan juntas”.
En este sentido, desde la PMP advierten de que la justicia intergeneracional no es un ideal, sino “una urgencia moral y política” para construir una sociedad más justa, solidaria y cohesionada.
Así, recuerda, que al igual que la población joven sufre precariedad laboral y falta de vivienda asequible, los mayores han de hacer frente a pensiones insuficientes, dependencia, soledad y pobreza energética. ·"Ambos fenómenos son caras de la misma desigualdad estructural y deben abordarse con políticas de justicia intergeneracional", zanjan.