Lo peor ya ha pasado, al menos en España. Los efectos del huracán Kirk, reconvertido en potente borrasca en las últimas horas, en la Península han sido considerables. No obstante, ya va cediendo en su efecto inicial, al contrario que el huracán -este sí- Milton, que está asolando con extrema fiereza Estados Unidos, incluso ya ha dejado algunos fallecidos. Por el momento, la AEMET no considera que éste también se desvíe hacia la Península, pero sí habla de la nueva amenaza que sobrevuela sobre el país para las próximas fechas.
No, no volverá el calor. Al menos no en el corto plazo. España empieza a coger aire y a recuperarse tras el fuerte paso de la potente borrasca Kirk, que generó problemas durante varios días y sumergió a decenas de provincias en grados altos de alerta por lluvia, fuertes vientos o fenómenos costeros. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) apunta a una mejoría relativa del escenario climático en el país, sobre todo tras un miércoles que ya se vislumbraba complicado en todo el territorio.
Pero la mejoría no será de gran calado y no se sentirá a nivel térmico. Si bien se pondrá fin a las rachas de viento huracanado, que incluso llegaron a superar los 200 kilómetros por hora en ciertos puntos del país, los expertos advierten de la llegada de una “nueva y profunda borrasca” que volverá a regar el territorio español con lluvias abundantes y, en esta ocasión, descargará más de lo habitual en áreas del sur de la Península.
El aviso de la AEMET, a través de un mapa satelital difundido a través de sus redes sociales, muestra una masa morada. Se trata de una nueva borrasca que acecha y amenaza a la península y cuya entrada se producirá, según prevén los expertos climatológicos, este mismo viernes. El temporal aterrizará en el país en el sur de manera más notable, pero podría afectar al oeste peninsular, Portugal y otras parcelas del territorio nacional de cara a este sábado, coincidiendo con la festividad del Día de la Hispanidad.
Jornada valle
Sin embargo, antes de la llegada de esa nueva amenaza en forma de “borrasca profunda”, los expertos prevén que este jueves esté marcado por un escenario de inestabilidad postfrontal, especialmente en el norte peninsular, con cielos encapotados y precipitaciones en forma de chubascos. Este temporal afectará especialmente en Galicia, Cantábrico, Pirineos y nordeste de Cataluña, según informan desde la Agencia Estatal de Meteorología. Asimismo, se espera que se rebaje a cuatro el número de autonomías en alerta amarilla por fenómenos costeros y rachas de viento. El aviso permanece en los territorios de Cataluña, Islas Baleares, Andalucía y Galicia.
Asimismo, la AEMET considera que habrá abundante nubosidad en el resto de la vertiente atlántica, con probabilidad de descargar alguna lluvia de carácter débil y dispersa, aunque más posible en zonas montañosas. Precipitaciones que, según consta en las previsiones de los expertos climatológicos, tenderán a cesar para dejar paso a cielos pocos nubosos. En el resto de la península se estima que predominarán cielos pocos nubosos y sin precipitaciones; mientras que en Canarias, pese a que no se prevén chubascos de ningún tipo, se registrarán intervalos de nubosidad.
En términos térmicos, los mercurios descenderán de forma generalizada, con excepción de aumentos puntuales en las máximas en Pirineos y el suroeste peninsular, así como las mínimas en áreas del sureste del territorio nacional. Los descensos más notables, sin embargo, se producirán en el Cantábrico oriental, la Ibérica sur y sierras del sureste; sin descartar posibilidades de heladas débiles en Pirineos y en Canarias.