Del alivio térmico de estos últimos dos días poco queda ya en la Península. Las temperaturas empezaron a subir este pasado jueves y lo harán descontroladamente durante el fin de semana. Este viernes será el aperitivo de la primera gran ola de calor del verano, que arrancará oficialmente el sábado y tendrá mayores efectos de los esperados en un primer momento. Según las últimas actualizaciones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), en un aviso difundido este pasado jueves, advierte de que este episodio se extenderá hasta el próximo martes, siendo el domingo y el lunes los puntos álgidos. Se prevé que las zonas más afectadas, con temperaturas superiores a los 40 grados centígrados, sean el valle del Tajo y el entorno del Guadalquivir, donde se superarán incluso los 42 puntos.
El organismo ya ha activado la alerta por calor extremo para este viernes en Córdoba, Granada, Huelva, Jaén y Sevilla. Además de hacer lo propio en las tres provincias de Aragón; en Ávila; en Castilla-La Mancha (Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo); en Cataluña (Girona, Lleida y Tarragona); en las dos provincias de Extremadura, la Comunidad de Madrid, Navarra y La Rioja. En definitiva, un total de 21 provincias de nueve autonomías están bajo el aviso naranja por temperaturas extremadamente elevadas.
Los puntos de la Península que estarán al rojo vivo serán Córdoba, Jaén y Sevilla, donde permanece el aviso naranja durante las horas centrales del día. El resto, estarán en nivel amarillo. Se espera que el mercurio supere los 40ºC en puntos del Valle del Guadalquivir, así como los 38 en el interior de la mitad sur peninsular y en parcelas próximas a la depresión del Ebro.
Amenaza a todo el territorio
El sábado será el día en el que, según la AEMET, comience de manera oficial la ola de calor. A partir de esta jornada, el incremento de los mercurios será indiscriminado, superando los 38 grados de manera generalizada y con visos a alcanzar los 40-42 en los valles del Guadiana, Ebro y Guadalquivir, pero también en las depresiones del nordeste. Provincias como Cádiz, Salamanca, Valladolid, Zamora, Guadalajara, Barcelona, Lugo, Ourense, Pontevedra, Murcia y Valencia, así como Mallorca, se sumarán a los avisos por calor extremo.
Las tres provincias andaluzas en riesgo (Córdoba, Jaén y Sevilla) seguirán siendo los puntos más calientes de la geografía española, aunque a ellos se les sumarán Huelva, Huesca, Zaragoza, Lleida, Tarragona y Badajoz. Por su parte, será en las zonas rurales de Sevilla donde se alcancen los picos más elevados de temperatura de la jornada, llegando a los 42 grados centígrados. En contraposición, los Pirineos, donde se prevé que el mercurio no sobrepase los 34 puntos.
El martes perderá fuerza
Un amplio anticiclón a niveles medios y altos que procede del interior de África tiene la culpa de este incremento térmico. Se intensificará a lo largo del sábado, extendiéndose paulatinamente a todo el territorio español e incluso no se descarta que alcance puntos del sur del continente europeo. Con él, llegará una masa de aire muy cálida y seca que, unido a unos cielos completamente despejados, es el responsable de la ola de calor.
De hecho, según apuntan desde la AEMET, serán el domingo y el lunes las jornadas más críticas de la primera ola de calor del verano. Se espera que el mercurio se dispare por encima de los 40ºC en zonas como el valle del Tajo, amplificándose aun más en el entorno del valle del Guadalquivir. Los valores serán notablemente elevados también en la meseta Norte, valle del Miño y el interior de Mallorca, así como en los alrededores del Júcar y el Segura, donde tocarán los 38 grados.
El lunes, la ola de calor abrazará al Cantábrico oriental y no se descarta en las previsiones que se sobrepasen los 38 grados. El anticiclón cobrará más fuerza, impulsando también las temperaturas mínimas. De hecho, según avanza la AEMET, no se espera que bajen de los 23-25 grados centígrados en zonas de la mitad sur y del valle del Ebro. Esta masa de aire caliente incidirá especialmente sobre Canarias, que además vivirá la entrada de calima en las islas orientales, siendo las cumbres orientadas al sur de Gran Canaria y Lanzarote las zonas más más afectadas y donde se podrían registrar valores superiores a los 35 grados.
El calor bajará ligeramente a partir del martes. Según apuntan desde la Agencia, se espera que una masa atlántica de carácter más fresco y húmedo repercuta en los termómetros, bajando el mercurio a su entrada por el noroeste de la Península. El descenso térmico abrazará el resto de la mitad norte del país en los próximos días, pero las temperaturas elevadas persistirán en el suroeste peninsular, con máximas de entre 38 y 40 grados centígrados.
