Quedan siete días y la maquinaria ya ha comenzado a rodar. Hablamos de la huelga feminista que se celebrará el próximo 8 de marzo, en el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. La última piedrecita de esta montaña de reivindicaciones por la igualdad la han puesto las mujeres periodistas o que trabajan en medios de comunicación, agencias y gabinetes.

En tan solo unas horas, ya son 4.000 las mujeres (y la cifra sube cada minuto) que han firmado un manifiesto con el que llaman a secundar la huelga o, al menos, a hacer paros en la medida de lo posible este 8M. Además, bajo los hashtag 8M #LasPeriodistasParamos, este manifiesto se ha convertido ya en toda una declaración de intenciones, en un ejemplo más para demostrar uno de los principales objetivos de esta huelga: que si las mujeres paran en sus puestos de trabajo, aunque sea por un día, medio país queda paralizado. Y la información también.

Así, este “grupo de periodistas de diferentes medios” se han unido a las reivindicaciones del 8M “para defender sus derechos y exigir una prensa en la que las mujeres tengan el peso que se merecen".

"Somos conscientes de la relevancia social de nuestro trabajo y, por eso, mostramos también nuestra preocupación por la visión parcial de la realidad que tantas veces ofrecen los medios y en la que falta la presencia y aportaciones de las mujeres. El feminismo también es necesario para mejorar el periodismo", expresan en el manifiesto.

Pero el objetivo es acabar con la brecha salarial, con la desigualdad entre hombres y mujeres también endémica en la profesión del periodismo, romper con la visión masculina de las informaciones, con el techo de cristal en la promoción o la precariedad laboral … y para ello, mujeres periodistas de decenas de medios han plasmado su nombre y apellidos en el manifiesto.

Porque "hay más que suficientes mujeres periodistas y expertas que pueden equilibrar esos espacios". "La visión de la realidad que transmiten es muchas veces parcial y está sesgada porque no tiene en cuenta en la misma medida las experiencias, los relatos y las vivencias de las mujeres".

Lee el texto íntegro del manifiesto #LasPeriodistasParamos

Mujeres periodistas de decenas de medios y agencias de comunicación, gabinetes de prensa, y, en general, trabajadoras de medios y empresas periodísticas apoyamos la huelga general feminista convocada para este 8 de marzo. De la misma manera, instamos a todas las compañeras a que se sumen a la movilización en la medida de sus posibilidades y circunstancias.

Todas sufrimos el mismo machismo que las mujeres del resto de sectores –precariedad, inseguridad laboral, brecha salarial, techo de cristal, acoso sexual o ninguneos– pero con las particularidades asociadas a nuestra profesión. Somos conscientes de la relevancia social de nuestro trabajo y, por eso, mostramos también nuestra preocupación por la visión parcial de la realidad que tantas veces ofrecen los medios y en la que falta la presencia y aportaciones de las mujeres. El feminismo también es necesario para mejorar el periodismo.

Por eso, en este 8 de marzo exigimos a los medios de comunicación y empresas periodísticas que tengan en cuenta nuestras reivindicaciones:

  1. La brecha salarial es una realidad en nuestro sector. Exigimos a las empresas transparencia salarial y una revisión de categorías, complementos y criterios profesionales que permitan acabar con ella.
  2. Techo de cristal. Las direcciones de los medios y empresas periodísticas están copadas por hombres. Reivindicamos nuestro derecho a ocupar puestos de poder y responsabilidad y a que se nos tenga en cuenta en las promociones profesionales para puestos intermedios.
  3. Precariedad. Sufrimos niveles de temporalidad superiores a los de nuestros compañeros. De la misma manera denunciamos la inestabilidad laboral de las compañeras freelance y de las falsas autónomas, una situación de precariedad que se ha hecho habitual en los últimos años.
  4. Corresponsabilidad y cuidados. Denunciamos que las dinámicas de trabajo priorizan el presentismo y la libre disposición y son ajenas a las necesidades de cuidado que tienen todas las personas. Creemos que la corresponsabilidad y la flexibilidad no debe ser un asunto de buena voluntad sino una prioridad que las empresas deben asumir para que estas tareas se repartan por igual entre mujeres y hombres. Como en otros sectores, una ausencia de conciliación real perjudica más a las mujeres, que acaban modificando o recortando sus horarios para poder cuidar e incluso abandonando su empleo o cambiando de profesión.
  5. Acoso sexual y laboral. Son muchas las periodistas que han sufrido por parte de compañeros y superiores, pero también de fuentes, situaciones de acoso sexual. Por otro lado, el ninguneo, la condescendencia, el paternalismo y los mansplaining están a la orden del día en las redacciones y fuera de ellas, en nuestra actividad diaria. Como profesionales de la comunicación sufrimos acoso online, además de comentarios violentos y machistas en nuestras piezas
  6. Los espacios de opinión y las tertulias están masculinizados. Hay más que suficientes mujeres periodistas y expertas que pueden equilibrar esos espacios.
  7. Mirada parcial y preocupación por los enfoques. Todas estas brechas que sufrimos las periodistas tienen consecuencias, también en los contenidos y en los enfoques de los medios de comunicación. La visión de la realidad que transmiten es muchas veces parcial y está sesgada porque no tiene en cuenta en la misma medida las experiencias, los relatos y las vivencias de las mujeres que, a menudo, son tratadas como personajes secundarios o con estereotipos. Un ejemplo es el tratamiento de la violencia machista, que en muchas ocasiones sigue culpabilizando a la víctima. Las primeras páginas, las aperturas de medios e informativos son decididas por hombres.

Instamos a la audiencia y a lectores y lectoras a ser cómplices de nuestras demandas. Las mujeres firmantes de este manifiesto lo hacen a título individual y no queremos que ningún partido político, sindicato o medio de comunicación se apropie de nuestras reivindicaciones.

Convocamos la lectura de este manifiesto el 8 de marzo a las 12:30 en la plaza de Callao de Madrid y animamos a que se convoquen otras lecturas en otras ciudades del país. Compañeras de Barcelona, por ejemplo, van a leerlo a la misma hora en los Jardines de Montserrat Roig. 

Si quieres sumarte, añade tu nombre y apellidos en este formulario y te incluiremos en la lista de adhesiones. Por favor, solo mujeres.