Recientemente Vox recurría a “la gloriosa historia de España” para arremeter contra el cine, sin embargo, nada impide que ellos mismos hagan una más que merecida película de Blas de Lezo y hasta donde yo sé no hay ninguna. Pero no nos engañemos, el trasfondo de la cuestión no es el cine, si no el concepto de “gloriosa historia de España” que defiende la formación.
Ciñéndonos al concepto más estricto de español, es decir, todos aquellos personajes coetáneos o posteriores a los Reyes Católicos nacidos en nuestro país, podríamos sacar una extensa lista de biografías indudablemente gloriosas incluso épicas y que por tanto imagino que le encantarían a Vox. Y atención, que quedan fuera el invicto general Almanzor o el martirizado obispo Prisciliano.
1 Luis de Santángel. El hombre que evitó que América fuera francesa.
Valenciano (de Vilamarxant para más señas) fue un hombre de finanzas imprescindible en el reinado de Fernando el Católico. Destacó sobre todo por evitar que Colón diese el salto a Francia para proponer allí su proyecto en vista del menosprecio en España. Santángel no dudó en financiar con sus arcas el viaje para mayor gloria de España. Curiosamente alguien tan admirable para todos los españoles fue perseguido por unos furibundos, aunque no menos españoles, miembros de la Inquisición. El Santo Oficio le acusó de ser criptojudío. El banquero y su familia solo se pudieron escapar gracias la intercesión de los Reyes Católicos, dándose la paradoja de acabar siendo salvado por los mismos que decretaron el edicto que le condenaba.
2 Los hermanos Valdés. Los humanistas que hicieron del castellano la lengua más culta del mundo.
Para evitar que nadie diga que detrás de la película de Santángel se oculta un contubernio judeo-masónico pongo ahora la historia de dos hermanos cristianos y defensores a ultranza del emperador Carlos V. Me refiero a los hermanos conquenses Alfonso y Juan Valdés.
Alfonso escribió la obra Diálogo de las cosas acaecidas en Roma donde justificó sin tapujos el saqueo de la ciudad eterna a manos de Carlos V. Su hermano Juan fue autor de Diálogo de la Lengua, en el que ensalzó el castellano como un idioma comparable al latín o cualquiera de las lenguas cultas de la historia.
Ahora bien, estos hermanos de basta cultura y excelente pluma, no tardaron en ser acusados de erasmista el uno y protestante el otro provocando incluso su huida de España.
Alfonso Valdés defendió tanto a Carlos V que llegó a decir que el saqueo al papa fue por su bien, pues ya advirtió Cristo de lo perniciosas que son las riquezas…
3 Saavedra Fajardo. La razón frente a la guerra.
Pasemos a la acción y dejemos atrás el mundo de la cultura, ¿Qué les parece una película de espías? Bueno pues tenemos reparto de sobra, por ejemplo Diego Saavedra Fajardo, espía de grandes casas nobiliarias, y enviado especial del rey en operaciones clave como la Dieta de Ratisbona o la Guerra de los Treinta Años.
Con semejante trayectoria cualquiera pensaría que Saavedra Fajardo fue un gran defensor de las campañas militares de España, sin embargo fue más bien al contrario. Su conocimiento en primera persona de los desastres de la guerra le hizo detestar la violencia dejándolo así escrito:
De que Dios vio como cosa muy ajena al hombre la actividad bélica nos da buena muestra el hecho de que lo hizo nacer desnudo y de que repartió entre las distintas tierras del orbe las riquezas para que todas tuviesen suficiente con sus recursos sin precisar los de las demás.
(…) Los tiranos suelen lanzarse a ellas a la menor oportunidad, pero los monarcas prudentes se cuidan más de defender lo suyo que de ocupar lo ajeno.
No estaría mal una película de un personaje como Saavedra Fajardo que ya en el siglo XVII dijo: No puede ser bien gobernado un estado cuyos ministros son avarientos y codiciosos, porque ¿cómo será justiciero el que despoja otros?
4 Teresa González. La pensadora del cielo.
Para evitar que las mentes recalcitrantes que estén leyendo esto entren en combustión humana espontanea he tenido el detalle de citar entre todos los personajes gloriosos una sola mujer, pero aun así merecería no pocas películas.
La cordobesa Teresa González, autora de al menos dos tratados de astronomía: El estado del cielo para el año de 1777, arreglado al meridiano de Cádiz. Pronóstico general y poco después El estado del cielo para el año de 1778, arreglado al Meridiano de Madrid: pronóstico general, con todos los aspectos de los planetas.
Ambas obras tienen el valor añadido de ser escritas por una mujer que, como todas en la época, tenía vetado el acceso a la información, un ejemplo que además de heroico tiene la parte poética de que Teresa se autodenominó con una de las mejores formas de decir astrónomo, “pensadora del cielo”.
5 Cayetano Ripoll. El maestro que enseñaba a ser libre.
Para no dejar a un lado la parte gloriosa del ejército hablemos de un oficial de infantería, el ilerdense Cayetano Ripoll que siendo un treintañero combatió con denuedo al ejército napoleónico hasta acabar prisionero en Francia.
A su regreso a España se estableció como maestro a las afueras de Valencia donde pronto fue acusado de deísta, es decir, ser creyente en Dios pero solo a través de la razón, y lo que es peor, transmitir esta postura a los niños.
El final se lo pueden imaginar, el 31 de julio de 1826 fue condenado a muerte por la iglesia ultra católica de Valencia. Como vemos, un ejemplo perfecto del amaos los unos a los otros...
6 Los españoles que liberaron París.
Llegados al siglo XX no voy a proponer otra película en la que los españoles se despedazan entre sí, planteo un largometraje en el que el heroísmo de los españoles no solo da gloria a su país si no al mundo entero. Esta historia por sus dimensiones épicas imagino que será muy del gusto de Vox. Me refiero a la 2º División Blindada del general Leclerc. También conocida como La Nueve, una división formada casi en su totalidad por soldados españoles republicanos que después de combatir a Franco lucharon y liberaron París del domino nazi.
Bueno por ideas no será, ahora solo nos queda aclarar a qué llamamos entonces “gloriosa historia de España” ¿La que objetivamente lo fue? ¿o solo la que nos interesa?