Tiempo atrás, dirigentes de Podemos ya advertían que el secesionismo catalán podría despertar las bestias de la España más nostálgica. Y en efecto, se han podido ver más que nunca banderas preconstitucionales en manifestaciones en defensa de la unidad de España. Este viraje también parece haberlo experimentado UPyD. No hay más que echar un vistazo a su cuenta de Twitter para constatarlo.

En el timeline tanto de UPyD como de sus dirigentes o exdirigentes, como Gorka Maneiro o Rosa Díez, los primeros tuits son autobombo. Los magentas se vanaglorian por haber sido el partido que interpuso la denuncia que ha cristalizado en la condena a cuatro años y seis meses de prisión para Rodrigo Rato por las tarjetas black.

Pero si hacemos scroll, los mensajes son bien distintos. El partido ha cambiado con el paso del tiempo (o al menos, ese cambio ha sido mucho más evidente en los últimos meses). La formación que se focalizaba en las denuncias a la corrupción y hacía de la higiene democrática su bandera ahora ha comprado el discurso de la extrema derecha.

Si se observan las palabras utilizadas por Rosa Díez, Cristiano Brown o la cuenta oficial de UPyD, rápidamente se relaciona su discurso con el de Vox. Nazis, golpistas, bolivarianos, podemitas… Todos estos calificativos han sido vertidos por magentas, pero también por Santiago Abascal y la derecha más ultra.

Y no es de extrañar que sigan utilizando términos semejantes puesto que VOX está subiendo en las encuestas hasta el punto de que hay sondeos que le otorgan un escaño en el Congreso de los Diputados. De hecho, una encuesta de Electomania también dio un diputado a los magentas.