Hace dos días que Albert Rivera publicó indignado en su cuenta de Twitter una supuesta agresión independentista a un ancianoa, que habría sido golpeado delante de su nieto. Y sin embargo, la realidad es muy diferente: no fue una agresión obra de independentistas, ni siquiera sucedió en Cataluña y además fue el anciano quien golpeó a un padre de familia inglés, que estaba acompañado de su hija. 

Un informe de la Policía Local del sitio donde sucedieron los hechos, Oliva (Valencia), pasa a describir los hechos: según la investigación, la herida en la frente que sufrió el vecino de Oliva de 75 años se la causó presuntamente un inglés que asistía al festival con su hija pequeña. Y fue el anciano quien empezó la pelea al propinar al otro un puñetazo en la cara. Todo sucedió en un concierto del Figatell Sound, cuando un par de músicos desplegaron una pancarta que decía "Fora agressors Autodefensa feminista" (Fuera agresores, autodefensa feminista). El ciudadano de 75 años comenzó a increpar a los músicos y a los asistentes al concierto, entre los que había numerosas familias con niños. Un ciudadano brtiánico, acompañado por su hija, le recriminó su actitud, a lo que el anciano reaccionó propinándole un golpe en la cara. El inglés respondió con un cabezazo y abandonó el concierto junto a su hija. El anciano acabó en el suelo con un corte en la ceja que fue atendido por los servicios de emergencia presentes. 

Pese al desmentido y al informe oficial, Rivera no ha matizado, ni corregido su tuit sobre "ruptura de la convivencia".