Esta semana será estudiada en el futuro. Cómo el efecto dominó sale a relucir a veces en política y un aleteo en Murcia desemboca en unas elecciones anticipadas en la Comunidad de Madrid. Pero vayamos por partes.

Alegando una lucha contra la corrupción, Cs amaneció el miércoles con una moción de censura pactada con el PSOE para expulsar al PP del Gobierno de la Región de Murcia y del Ayuntamiento de la capital. Acto seguido y temiendo una jugada similar, Isabel Díaz Ayuso presentó su dimisión y anunció un adelanto electoral para el 4 de mayo. Tras la decisión de la líder popular, Más Madrid y PSM presentaron sendas mociones de censura siendo ambas aceptadas por la Asamblea. ¿Qué prevalece? ¿Las elecciones o las mociones? Ni los juristas consiguen aclararse. Mientras la Justicia decida qué sucederá, los ciudadanos madrileños deberían ir preparándose para votar en primavera.

Volviendo al lío murciano, cuando todo estaba firmado para expulsar a Fernando López Miras, el Partido Popular ha conseguido atar el voto de 3 diputados. Adiós moción de censura, adiós Gobierno de Murcia y adiós vicepresidencia de la Comunidad de Madrid. Y quién sabe cuál es el futuro de Ciudadanos. Tres días de puro maquiavelismo castizo que dejan algo claro: todos temen a Ayuso e Inés Arrimadas ha cavado su tumba política.

Y como era de esperar, las empresas demoscópicas han comenzado a publicar los primeros datos del estado del votante madrileño y ya se empiezan a ver los primeros cambios respecto a las elecciones de 2019. Tras el análisis de los elementos de la última semana de Demoscopia y ServiciosHamalgama, Metroscopi, GAD3 y Electomanía y elaborar un promedio de todos sus datos, llega una nueva edición de la madre de todas las encuestas en Madrid.

Intención de voto

A pesar de que solo han pasado dos años, la situación política ha cambiado muchísimo. Si en mayo de 2019 Ángel Gabilondo fue el líder más votado con el 27,3% de los votos, en la actualidad Isabel Díaz Ayuso sería quien ganaría las elecciones con el 35%. El socialista conseguiría el 27,6% de los votos en un resultado prácticamente idéntico que hace dos años, aunque no suficiente para hacerse con la victoria.

A continuación, el resultado de Ignacio Aguado sería dramático y evidenciaría la situación de crisis que vive Ciudadanos. Del 19,4% de los votos a un 5,2%. Sin embargo, a pesar del bajón, ese pequeño porcentaje podría resultar decisivo a la hora de formar gobierno. Por su parte, la ultraderecha confirma su buena situación y Rocío Monasterio pasaría de hacer un 8,8% al 12,8%.

En cuanto a la izquierda, se confirma su división y Más Madrid y Podemos irán por separado a las elecciones. Una decisión lógica teniendo en cuenta de falta de relación entre ambas organizaciones pero que merma sus posibilidades electorales. Mónica García empeoraría ligeramente el resultado de Íñigo Errejón en 2019 y conseguiría en la actualidad el 12,2% de los votos y Podemos se mantendría alrededor del 5%.

Escaños

En cuanto al reparto de escaños cabe destacar que la victoria de Ayuso se traduciría en una horquilla de 50-51 escaños para el Partido Popular. Un gran resultado respecto a 2019 cuando los populares de Madrid consiguieron 30 asientos en la Asamblea. Teniendo en cuenta que la mayoría absoluta está en 69 escaños, los 17-18 que conseguiría Vox podrían ser suficientes para garantizar la victoria de Ayuso. Por tanto, la líder madrileña podría no necesitar a Ciudadanos para poder formar Gobierno que se harían con 5.

En cuanto a la izquierda, el PSM conseguiría entre 39-40 escaños, Más Madrid 17 y Podemos estaría entre 6-7 escaños.