Fernando Almansa, exjefe de la Casa Real y actual consejero del Rey, afirma en declaraciones al diario ABC que el monarca “ha hecho lo que debía y tenía que hacer”, con “coraje, valentía y autoridad, y que "ha dado la respuesta adecuada, evitando, por supuesto, ir por delante del proceso judicial y respetando la presunción de inocencia de Iñaki Urdangarin y la independencia de la Justicia”. ¿Se refiere a la rueda de prensa de su sucesor en el cargo, Rafael Spottorno, en la que se limitó a calificar las actuaciones del duque de poco ejemplares o a la desafortunada afirmación de Don Juan Carlos de que “la Justicia es igual para todos” en su mensaje navideño, en el que por cierto, no mencionó el nombre de su yerno?

Las filtraciones de la prensa
El asesor personal del Rey, eso sí, carga contra los medios de comunicación por “las filtraciones” que se han producido de la investigación policial y judicial alrededor del duque de Palma. Almansa califica de “escandaloso”, no la actuación del marido de la infanta Cristina, que supuestamente se valió de fundaciones sin ánimo de lucro, entre ellas una dedicada a niños con discapacidad y enfermos de cáncer, para acaparar fortuna, sino que la prensa diera buena cuenta de ello.

Lo que escandaliza a la Casa Real
“Escandaliza que no se haya respetado el secreto del sumario; que todas esas informaciones se hayan divulgado, incluso hayan llegado a la opinión pública antes de que fuesen conocidas por el propio interesado, lo cual ha producido una indefensión, que para quienes respetamos y creemos en el Estado de Derecho nos produce un gran rechazo”. Se ha quejado el portavoz del Rey en el diario monárquico.

La Zarzuela, ejemplo de transparencia
Almansa intenta hacer la cuadratura del círculo al explicar “el ejercicio de transparencia del Rey, que es de aplaudir” -puntualiza- por publicar “la asignación que recibe para el mantenimiento de la Casa Real y de su función como jefe del Estado español”. Todo un ejemplo, según dice que “podrían seguir otras instituciones. Precisamente la falta de transparencia de las cuentas reales ha sido, y lo continúa siendo, criticada de manera reiterada por sectores de la sociedad y grupos políticos.