Venezuela vive pendiente de un hilo. El curso de los acontecimientos se aceleró cuando el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, se autoproclamó “presidente encargado”. Estados Unidos le reconoció inmediatamente y, pronto, el escenario internacional quedó dividido en dos: los que reconocen a Guaidó y los que apoyan a Nicolás Maduro. La situación es notablemente compleja y si hay alguien que lo está viviendo con especial sensibilidad es el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero.
Hizo las veces de mediador entre la oposición y el Gobierno de Maduro y conoce de primera mano la realidad venezolana. Por este motivo, se le pregunta en cada aparición pública.
“Si de verdad queremos democracia para Venezuela, paz y estabilidad, sólo hay un camino, que es el diálogo, la negociación y el acuerdo", ha declarado Zapatero en el Word Law Congress que acoge el Teatro Real de Madrid.
A su juicio, la situación es más difícil de lo que “muchos ciudadanos de buena fe puedan imaginarse”. El expresidente ha estado “en los momentos más difíciles”. Asegura que hay una gran división entre el “pueblo chavista” y la oposición, y que esta realidad está bien arraigada.
En consecuencia, Zapatero cree que la salida solo podrá ser mediante el “diálogo” y cree fervientemente que “ese camino se impondrá”.
De hecho, ha precisado que no se puede imponer ninguna ruta que conlleve la imposición de “la fuerza” porque sería “dramático”. “Por tanto, si queremos a Venezuela y América Latina, si queremos la paz, los valores democráticos, defendamos el diálogo para buscar salidas y soluciones”.
