El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha defendido este martes a su asesor para Seguridad Nacional, Michael Waltz, tras incluir, por error, a un periodista de The Atlantic en un chat abierto en Signal entre varios altos cargos de la Administración de Estados Unidos sobre operaciones militares contra Yemen.

"Waltz ha aprendido la lección, es un buen hombre", ha dicho en declaraciones concedidas a la cadena de televisión estadounidense NBC, en las que ha indicado que la presencia en el grupo del periodista, Jeffrey Goldberg, "no tuvo impacto alguno" en la operación militar contra los rebeldes hutíes en Yemen.

Asimismo, ha explicado que el número del periodista habría sido agregado a la conversación por un miembro del equipo de Waltz. "Un trabajador metió su número ahí", ha subrayado, al tiempo que ha afirmado que el incidente "es el único fallo técnico en dos meses y ha resultado no ser grave". Sin embargo, el artículo de Goldberg detalla que recibió una invitación al grupo de Signal, una red social encriptada, de un usuario “identificado como Waltz”, pero que “no asumió que era un mensaje del Michael Waltz de verdad” debido a la animosidad entre Trump y el medio de comunicación.

Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, ha asegurado este martes que no se envió "material clasificado" a través del chat, en el que "no se discutieron 'planes de guerra'", antes de afirmar que el periodista es "conocido" por sus informaciones "sensacionalistas".

Asimismo, ha recalcado en su cuenta en la red social X que la oficina del consejero de la Casa Blanca "ha dado indicaciones sobre una serie de plataformas diferentes en las que altos representantes del presidente Trump pueden comunicarse de la forma más segura y eficaz posible". "Como indicó el Consejo de Seguridad Nacional, la Casa Blanca está analizando cómo pudo agregarse sin querer al hilo el número de Goldberg", ha indicado Leavitt.

"Murieron terroristas y eso es lo que más importa al presidente Trump", ha zanjado, un día después de que el propio Goldberg desvelara lo sucedido. Además, ha añadido que “el presidente sigue teniendo confianza en su equipo de seguridad nacional, incluyendo a Mike Waltz”. “Las historias que afirman otra cosa están motivadas por fuentes anónimas que claramente no hablan con el presidente y están escritas por periodistas que están sedientos de una exclusiva”, zanjó.  

El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Brian Hughes, reconoció tras ello que los mensajes, enviados a través de la aplicación de mensajería encriptada, parecían ser auténticos, sin ofrecer ninguna explicación de por qué funcionarios de alto rango estaban tratando información de defensa nacional fuera de los sistemas clasificados gubernamentales aprobados.

Qué descubrió el periodista del Atlantic

Entre los 18 miembros del grupo al que fue añadido Goldberg y que detalló en su artículo del Atlantic, estaban el secretario de Defensa, Pete Hegseth; el vicepresidente, JD Vance; el secretario de Estado, Marco Rubio; la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard; y el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), John Ratcliffe.

Estos hablaron de los ataques contra los hutíes en Yemen en detalle que el periodista insiste en que dudaba de su autenticidad durante el tiempo que formaba parte del grupo debido a su naturaleza extraordinaria -según Goldberg, Signal se utiliza mayoritariamente para establecer reuniones y no para intercambiar información confidencial-. Al parecer, ninguno de sus miembros fue conscientes de su presencia en el grupo y contactó con varios de ellos para preguntar sobre su conocimiento de su presencia en las conversaciones.

Goldberg afirma que Hegseth le “envió el plan de guerra a las 11:44 am”, estrategia que incluía los detalles sobre el armamento utilizado, los objetivos y la hora del ataque. Además, las capturas de pantalla proporcionados por el periodista enseñan al vicepresidente estadounidense, J.D Vance, decir que “está harto de rescatar a Europa otra vez”. Este mensaje se refiere a las motivaciones del ataque estadounidense a los hutíes que facilitan el flujo marítimo en el Canal de Suez y el Estrecho de Mandeb, cuyo tránsito se había dificultado por los hutíes. Facilitaría el tránsito de buques israelíes, pero el principal beneficiado del ataque es Europa, según Vance, porque el 40% del comercio europeo pasa por el canal.

También se adelantó que, al abrir este paso marítimo, el equipo del presidente estadounidense buscará una remuneración europea: “De acuerdo con la solicitación del presidente [Trump], estamos trabajando con el Departamento de Defensa y el [Departamento de] Estado para determinar cómo compilar el coste asociado e imponerlos sobre los europeos”. Los miembros del grupo acordaron que se tenía que elaborar una estrategia para asegurar que tanto Europa como Egipto garantizasen que habría “beneficios económicos” de la maniobra.

Por qué bombardeó Estados Unidos a los hutíes

Los hutíes son un grupo político-militar formado en Yemen que cuentan con el apoyo de Irán, pero que sufren de una enorme inestabilidad interior en el país; esta volatilidad hace que el grupo concentre sus ataques hacia el exterior en búsqueda de legitimar su poder. Entre los países que el grupo opone, destaca Arabia Saudí e Israel -su lema exige la muerte de israel-, aliados que fueron señalados en el hilo de mensajes presenciados por el periodista del Atlantic. Este grupo yemení utiliza la localización geográfica del país para controlar el Estrecho de Mandeb y antagonizar a Israel a través del estrecho para que cese la guerra en la Franja de Gaza.

El ataque estadounidense mató a “líderes claves de los hutíes, incluyendo a su jefe de misiles”, según Waltz. Los hutíes no han confirmado estas muertes, pero su portavoz, Anees Alasbahi, comunicó que “murió un civil y otros 13 han sido heridos, incluyendo a tres niños” en el ataque.

Debido al cambio en escenario que se está viendo en todo Oriente Medio a raíz del cambio de régimen en Siria, Israel se encuentra en una posición geopolítica mucho más fuerte que antes, por lo que una retaliación hacia los hutíes es una preocupación significativa para la administración de Trump. Esto explica el mensaje de Hegseth, detallado por Goldberg, que señala la retaliación israelí junto con el derrumbe de la posibilidad de un alto al fuego en Gaza como una “amenaza inmediata”.

El grupo de Signal, particularmente Waltz, destacó la necesidad de que Estados Unidos sea el responsable de liberar una ruta marítima: “Ya sea ahora o dentro de varias semanas, tendrá que ser Estados Unidos quien reabra estas vías marítimas”. Es probable que la clave de la autoría del ataque está motivado por la necesidad de controlar la retórica del ataque para que resulte, como señala Hegseth en los mensajes recopilados (centrar el mensaje en que el grupo está “financiado por Irán”) que Estados Unidos ha triunfado contra Irán.