Marine Le Pen no seguirá al frente de Agrupación Nacional. Tal y como ha confirmado la propia dirigente ultraderechista, ha decidido abandonar el cargo para centrarse en las actividades parlamentarias de la formación con vistas a las futuras elecciones presidenciales de 2027.

Su puesto al frente del partido ultra lo ocupará el eurodiputado Jordan Bardella, quien este sábado lograba imponerse en el XVIII congreso de la RN, celebrado en la Maison de la Mutualité, un centro de conferencias del distrito quinto de París. En concreto, Bardella, presidente en funciones desde 2021 y gran favorito, ha obtenido el 84,4% de los votos frente al alcalde de Perpiñán e histórico del partido, Louis Aliot, que no ha pasado de un raquítico 15%. Un porcentaje muy superior al 67,65% de los votos que obtuvo Marine Le Pen frente a Bruno Gollnisch para suceder a su padre, Jean-Marie Le Pen, hace once años.

De esta manera, será la primera vez que el partido ultraderechista se queda sin un Le Pen al frente del destino de la formación desde su fundación como Frente Nacional hace 50 años. Sin embargo, se da la circunstancia de que el eurodiputado, de 27 años, abanderado de los movimientos antiinmigratorios y afiliado al partido desde los 16 años, mantiene una relación con la sobrina de Le Pen.

Le Pen, arquitecta de la renovación del partido

Le Pen, que ha sido la encargada de anunciar los resultados, se hizo con las riendas del partido de manos de su padre, Jean-Marie Le Pen, en 2011, y renombró siete años después el que era conocido como el antiguo Frente Nacional, para hacer de la formación una ultraderecha más adaptada a los tiempos que corren, lejos del anquilosamiento que representaba su predecesor.

Marine Le Pen se centrará ahora en el liderazgo del bloque parlamentario de su partido, la fuerza más importante del Parlamento desde las elecciones de junio, con 89 escaños.

“No dejo la presidencia de nuestro movimiento para irme de vacaciones. Sigo movilizada. No habrá reposo para mí, como para ninguno de nosotros, hasta que hayamos enderezado el país”, ha subrayado Marine Le Pen, que ha aprovechado su discurso de despedida para poner en valor el notable ascenso que ha tenido la formación ultra bajo su mandato.