Con el paso de los días se van conociendo más y más detalles sobre la vida personal de los principales implicados del conflicto en Ucrania, principalmente del presidente de Rusia, Vladimir Putin y el líder de Ucrania, Volodimir Zelenski.
Sobre Vladimir Putin ha hablado en los últimos días una persona, presuntamente muy cercana –posiblemente la más si lo que dice es cierto- a él. Se trata de Vera Putina, una mujer de 96 años que asegura ser su madre biológica.
Una vida en los suburbios y el orfanato de Putin
Irina Bobrova reconstruyó la historia de la mujer en el diario ruso Moskovski Komsomolets. Según las informaciones, Vera nació en el año 1926, en el distrito ruso de Ochyorsk (región de Perm Krai) y fue durante sus años en la Universidad – en la que estudió mecanización agrícola- cuando conoció a Platon Privalov, de quien se habría quedado embarazada de Putin. Sin embargo, descubrió que Privalov estaba casado y que era estéril, por lo que su único objetivo era el de robarle el bebé.
Según su relato, el ahora presidente ruso nació en el año 1950 y al cumplir los nueve años se habría mudado con sus abuelos maternos, obligado por el esposo de Vera. "Mi marido no lo quería aquí. Temía que tendría que mantenerlo", cuenta la mujer, según recoge Cuatro al Día. Un tiempo después, lamenta, su abuelo lo terminó dejando en un orfanato.
Cuenta cómo “reconoció a Putin”
Desde entonces, Vera asegura que no ha vuelto a saber de su hijo, hasta que un día lo vio en televisión. Entonces, dice, sintió “un pálpito”. Asegura que lo que más le llamó la atención es que andaba “como un pato” y de una forma muy parecida a la suya.
Actualmente, la mujer sigue viviendo en los suburbios de Georgia. Desde allí asegura que “el corazón de una madre nunca falla”, pero reconoce que un reencuentro con él es imposible. “¿Qué puede una sola persona hacer? Yo tengo mi vida”, asevera.
¿Presiones por parte del Kremlin?
Vera mantiene haber sufrido presiones por parte del Kremlin para que la verdad no salga a la luz, aunque desde las autoridades rusas defienden que es una versión disparatada.
La mujer sostiene que varios periodistas han muerto en situaciones sospechosas cuando se disponían a entrevistarla o realizar reportajes sobre el tema. Uno de ellos es el italiano Antonio Russo, asesinado mientras cubría la Guerra de Chechenia, y el otro Artyom Borovik, de origen ruso y que intentó llegar hasta ella para hacer un documental.
Versión oficial
La versión oficial sobre los padres de Putin -y a pesar de que existen muy pocos detalles sobre la infancia de éste- es que lo tuvieron cuando ambos tenían 40 años y murieron antes de que el ahora presidente ruso llegara a serlo.
Entre los pocos detalles que se conocen de los primeros años del líder de Moscú es que estuvo en la KGB y que creció en un orfanato durante una niñez complicada.