La isla del volcán Hunga Tonga-Hunga Ha'apai, que registró una erupción violenta el 15 de enero, con un gigantesco hongo de vapor, gas y ceniza, ha desaparecido en su práctica totalidad.

Esta área de tierra emergida en medio de Polinesia, creada por una erupción en diciembre de 2005, ya no existe, como se puede ver al comparar uuna imagen tomada por el satélite Sentinel 2 de la UE el 2 de enero, con otra del Sentinel 1 adquirida 12 horas después de la gran erupción, cuando la nube se disipó lo suficiente para observar la zona desde el espacio.

Se trata de los mismos satélites que pudieron monitorizar la reciente erupción en la isla de La Palma y que han sido fundamentales para controlar y monitorizar el avance de las coladas.

Ubicada unos 45 kilómetros al noroeste de la capital de Tonga, Nuku'alofa, y con una longitud de 500 metros, la isla tomó forma entre dos islas anteriormente formadas por el volcán submarino Hunga Tonga después de que entrara en erupción en diciembre de 2015.

En las nuevas imágenes, solo quedan vestigios de aquellas dos islas iniciales. La isla estaba formada principalmente por la acumulación de roca magmática fragmentada.

Imagen satelital de la isla del volcán Hunga Tonga antes y después del 15 de enero. COPERNICUS

Se comienzan a evaluar los daños

Las autoridades de Nueva Zelanda y Australia han anunciado el despliegue de varios aviones de sus respectivas Fuerzas Aéreas para supervisar y monitorizar los daños provocados por el tsunami provocado por el volcán.

La erupción ha expulsado una fuerte columna de humo y ha contaminado el suministro de agua en Tonga, donde también se han visto cortadas las comunicaciones por la densa humareda.

Sin embargo, este lunes se han reanudado los vuelos con Nueva Zelanda y Australia, que ahora supervisarán el estado de las infraestructuras, como carreteras, puertos y cadenas de suministros.

Una comisión neozelandesa ha alertado de que se han registrado daños significativos a lo largo de la costa oeste del país, según informaciones del diario 'The New Zealand Herald'.

El domingo, el Gobierno de Tonga, que ha convocado un gabinete de crisis para abordar la cuestión, pidió a la población utilizar mascarillas para lidiar con el humo y las partículas en suspensión.

Tres muertos por el tsunami

Una mujer británica de 50 años, Angela Glover, ha sido confirmada como la primera víctima mortal del tsunami.

Grandes zonas del archipiélago que conforma Tonga se encuentran incomunicadas por los daños causados por la erupción y el tsunami, que provocó la alerta durante el fin de semana de Japón a Chile y de Alaska a Australia. Hasta el momento se habían confirmado dos bañistas muertas en Perú por el oleaje y diversos daños materiales en Nueva Zelanda.

La última víctima, Glover, estaba intentando salvar a sus perros del gran oleaje provocado por la erupción cuando se soltó del árbol al que estaba agarrada y fue arrastrada por el agua, según informa la cadena británica Sky News, que cita a la familia de Glover. La mujer gestionaba un refugio para animales en Tonga junto a su marido, que ha sobrevivido.