Vladimir Putin no cuenta con muchos aliados a nivel europeo, y menos en las circunstancias actuales en las que se encuentra con la guerra de Ucrania. Con este escenario de fondo, algunas familias reales de Europa se han pronunciado en favor del pueblo ucraniano con gestos de solidaridad y apoyo en repulsa a la invasión rusa, a pesar de que las monarquías europeas deben mostrarse neutrales con conflictos políticos y bélicos.

En el caso de Reino Unido, la reina Isabel II ha aportado un "generoso donativo" en nombre de una coalición de organizaciones humanitarias, en la cual se incluyen Cruz Roja o Save the Children, entre otras conocidas. Asimismo, el príncipe Carlos de Inglaterra y su esposa Camila tacharon de "agresión" la ofensiva militar de Putin en Ucrania: "Desde aquí adoptamos la postura de solidarizarnos con todos aquellos que resisten a la brutal agresión”, condenaron. 

La reina Letizia, por parte de España, optó este jueves por hacer un guiño hacia el país a través de la moda. La esposa de Felipe VI acudió al acto de las Ayudas a Proyectos Sociales de la Fundación Mutua Madrileña en su X Convocatoria vistiendo una sorochkauna blusa blanca con adornos tradicionales ucranianos, para mostrar con un toque sutil su apoyo a Ucrania.

 

Los príncipes noruegos Haakon y Mette-Marit rezaron por Ucrania en una celebración especial 1 de marzo en la iglesia Trinity de Oslo, pidiendo paz por el país y por los ciudadanos inocentes: “Junto con las iglesias de todo el mundo, oraremos por una paz justa. Pedimos el fin de la guerra en Ucrania y protección y ayuda para todos los afectados en la guerra y las áreas afectadas por el conflicto”, exclamó el obispo Kari Veiteberg.

Por último, los principales herederos de Dinamarca también se solidarizaron con el pueblo ucraniano. El príncipe Federico, junto a sus hijos de 11 años, Vicent y Josephine, acudieron a las puertas de la Embajada de Ucrania a depositar un ramo de flores como símbolo de apoyo: "Es infinitamente triste lo que estamos viviendo en Europa ahora mismo, y es desgarrador seguir la situación en Ucrania. Mi familia y yo estamos profundamente conmovidos por las imágenes y las historias que presenciamos a diario", escribió la Casa Real Danesa. 

 

El día en que nació la enemistad entre Isabel II y Putin

Cabe recordar el día en que el mandatario ruso conoció a la reina Isabel II en 2003, un momento clave en el que, a ojos del mundo entero, quedó latente la enemistad entre ambos. Cuando Putin llevaba tan solo cuatro años en el poder del Kremlin hizo una visita a Reino Unido. El presidente ruso llegó tarde a la cita por 14 minutos, lo que impacientó a la soberana y provocó una ruptura del protocolo real y, a su llegada, uno de los perros que la acompañaba empezó a ladrar furiosamente. “Los perros tienen instintos interesantes, ¿no es así?", llegó a comentar la monarca. 

 

La animadversión entre la reina y el presidente no quedó en ese punto, sino que fue creciendo a lo largo de los años. En 2014, en una cumbre con múltiples líderes europeos en Francia, la monarca se sentó muy alejada de Putin ya que, escasos meses atrás, se rumoreó que el príncipe Carlos había comparado al ruso con el nazismo. En el momento de la foto grupal que inmortalizó a los representantes europeos, Putin no ayudó a Isabel II a bajar de las escaleras, un gesto que fue muy criticado, aunque fue el expresidente estadounidense, Barack Obama, quien actuó en el momento preciso.