Donald Trump parece estar listo para abandonar la Casa Blanca, aunque insiste en su interés de justificar su derrota electoral las Elecciones de Estados Unidos del pasado mes de noviembre con un presunto amaño realizado por el partido demócrata de Joe Biden.

El todavía presidente estadounidense está más cerca que nunca de terminar con su mandato y la familia Trump no ha dudado en escoger una nueva vivienda para comenzar una nueva andadura fuera del despacho oval.

Donald y Melania Trump tienen decidido cuál será el hogar en el que se hospedarán y, no, no volverán a la que había sido su residencia oficial hasta la victoria electoral de 2016, en Nueva York, la Trump Towerlos Trump han decidido marcharse fuera de Nueva York y residirán en el exclusivo centro turístico Mar-a-Lago de Palm Beach, en Florida.

No es la primera ocasión en la que la familia viaja a este complejo lujoso. En él podrán encontrar playa privada, un campo de golf, siete pistas de tenis, entre otras múltiples opciones. La zona es propiedad de Trump, aunque tuvo que reconvertirlo en un club en los años 90 debido a problemas económicos.

Entre algunas de las normas más llamativas está la de obligar a los miembros del club a no pasar más de 21 días anuales en las suites para huéspedes, tal y como recoge Vanitatis.

El club cuenta con 118 habitaciones y está abierto para cualquier persona que quiera hacerse socia. Para ello se deberá abonar una cantidad de 200.000 dólares, cuota que se vio elevada tras la victoria electoral de Trump en 2016.

El club de Mar-a-Lago estuvo en el centro de las investigaciones tras las acusaciones de una de las víctimas de Jeffrey Epstein, en septiembre de 2019, en las que aseguraba que en esta vivienda había sido reclutada para una trama de explotación sexual en el año 1999.