Una serie de ataques en Líbano, atribuidos a Israel, han resultado en la trágica muerte de dos personas vinculadas a la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) este martes, 24 de septiembre. La agencia ha expresado su profunda indignación y ha reiterado la necesidad de respetar el Derecho Internacional y asegurar la protección de la población civil en cualquier circunstancia.
Una de las víctimas mortales ha sido identificada como Dina Darwiche, que había dedicado los últimos doce años de su vida trabajando para ACNUR en la región de la Becá, al este de Líbano. El edificio donde residía con su familia fue impactado por un misil, resultando en la muerte de Dina y su hijo pequeño.
El segundo fallecido es Ali Basma, empleado de una empresa de limpieza en la oficina de ACNUR en Tiro, ubicada en la zona suroeste del país. La agencia ha destacado la importancia de la protección de los civiles y ha hecho eco del llamamiento del secretario general de la ONU para una desescalada urgente de la situación.
ACNUR, por su parte, ha reafirmado su compromiso con la población libanesa, especialmente durante este momento crítico. La organización ha hecho un llamado a todas las partes involucradas para que se respeten las normas del Derecho Internacional y se proteja a los civiles sin excepción. Esta tragedia subraya la urgente necesidad de buscar soluciones que garanticen la seguridad y el bienestar de los individuos afectados por el conflicto en la región.