Una de las informaciones más impactantes sobre la corrupción del PP de Valencia destapada por la Operación Taula es que presuntamente se financió la campaña de Rita Barberá a la alcaldía blanqueando dinero con métodos como el siguiente: obligar a trabajadores del partido a ingresar 1.000 euros de donación al PPCV y luego la organización se lo reintegraba en billetes procedentes de dinero negro.
Un método que no era "privativo" de Valencia
Pero ayer en Espejo Público el periodista Casimiro García-Abadillo fue más allá al decir que ese método no era "privativo" de Valencia y señalar directamente a Génova 13. Así, tras exponer que en Valencia se blanqueaba con el método de los sobrecostes utilizando empresas amigas como la Orange Market de Álvaro Pérez El Bigotes, luego se explayó sobre el método de blanqueo a través de los trabajadores. Y ahí soltó la bomba.
Abadillo señala directamente a Génova 13
"La otra forma de blanquear que ojo, no es privativa de Valencia y yo preguntaría en Génova, es que cuando había mucho dinero en caja una persona que conocemos Raúl [del Pozo] y yo, lo que se hacía era parecido. Se le daba a los empleados un sobre con 1.000 euros para que los fueran a ingresar en el banco que hay al lado de la sede del partido como donación. Claro, esa era una forma de blanquear ese dinero B. No es que lo ingresaran ellos el dinero [los trabajadores] y luego se lo devolvieran en billetes, se les daba directamente el dinero en un sobre para que lo ingresaran".
"Dios mío", concluyó perpleja la presentadora del espacio, Susanna Griso. La denuncia del exdirector de El Mundo puede verse en este vídeo a partir de los 54 minutos del programa.
