En el transcurso de una visita a Vigo para apoyar a los candidatos de Vox a Congreso y Senado por la provincia de Pontevedra, el vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha acusado a la periodista Ana Pastor, de La Sexta, que anoche moderó el cara a cara entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo, de haber perdido “lo que debe presidir la moderación de un debate, que es la neutralidad”, a raíz de su pregunta a los candidatos sobre la violencia machista.

“Estamos sufriendo, señor Feijóo, un goteo insoportable:”, dijo Pastor, “en los últimos días, seis mujeres han sido asesinadas a manos de sus parejas o exparejas y hoy hemos visto una imagen, la de Vox en el minuto de silencio de respeto a la víctima, saliéndose de ese minuto de silencio; partido con el que ustedes gobiernan en la Comunidad Valenciana y en otros territorios. Le pido que se dirija a las mujeres que están viendo este debate y que quizá están preocupadas y con miedo por que ese partido, Vox, niega la violencia de género, y puede que sea su socio también en España”.

Las “verdaderas amenazas” a las mujeres

Mientras Feijóo bajaba la cabeza revisando folios y lanzaba después balones fuera refiriéndose a los votos del PSOE en los parlamentos de Murcia y Cantabria, para después centrarse en la ley del “Sólo sí es sí”, sin responder a la pregunta, Gallardo centraba su atención en las palabras de la periodista, a la que señala, afirmando que “acusó a Vox de infundir el miedo a las mujeres, cuando es todo lo contrario, porque es Vox”, ha predicado, “el partido que más protege a las mujeres frente a sus verdaderas amenazas y sus problemas”.

“Vimos a una moderadora”, ha insistido, “que ignoró esto, y acusó a Vox de infundir el miedo, cuando son realmente los cien violadores soltados con esa nefasta ley del “Sólo sí es sí” quienes tienen atemorizadas a las mujeres de España con esas negligencias del Gobierno de extrema izquierda”.

Oda al pacto en Baleares

Además de denostar, como su líder, Santiago Abascal, la oferta de pacto de Feijóo a Sánchez para que gobierne la lista más votada el 23J, y de calificar de “perturbado” al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que según su opinión “ha traído la ruina, la desesperanza, el odio y la división entre los españoles”, Gallardo, desde el otro extremo del mapa, también ha tenido alabanzas para el pacto PP-Vox en Baleares, celebrando, literalmente, la supresión de la Consejería de Igualdad en aquella Comunidad Autónoma.

“Una consejería”, ha dicho, “que no había sido útil para aplicar políticas que garantizaran la igualdad de oportunidades entre los españoles residentes en las Islas Baleares, sino que ha servido para dividir a los españoles y enfrentarles por su sexo, que no ha traído ni la unión ni la concordia entre los españoles allí residentes”.

Gallardo apuesta, sin embargo, por la Consejería de Familia que se ha creado, que “va a aplicar protección de las familias y promoción de la natalidad”, y ha defendido un programa de medidas del pacto PP-Vox en esa Comunidad que prioriza la seguridad, el control de la inmigración ilegal, y la libertad lingüística.

Vox no entiende el “escándalo” por la violencia machista

Con una mano, el vicepresidente de Castilla y León asegura que “no hay motivo para el temor”, porque, según dice, los pactos PP-Vox ya en marcha “están siendo útiles para la ciudadanía”, y, de hecho, insta al PP a decir “qué concreto punto de esos acuerdos” no le gusta; pero con otra, insiste, -a preguntas de los periodistas sobre la huida ante la violencia machista en Valencia-, en que “actualmente, lo que se está difundiendo es la dictadura del pensamiento único”.

Según Gallardo, la postura de Vox ante la violencia sobre las mujeres, que se ha llevado por delante la vida de 1.212 desde que empezó a contabilizarse, en 2003, es que “no terminamos de entender por qué un concepto como la violencia doméstica o intrafamiliar, común en otros países, supone aquí tanto motivo de escándalo”.

En su opinión, la normativa contra la violencia de género “ha conseguido perjudicar a los hombres inocentes y a las mujeres maltratadas”, y su partido “no va a participar del concepto de género”, ha concluido, “que es un concepto ideológico que no está yendo a la raíz del problema”.