El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dejado un recado este miércoles durante su comparecencia a petición propia para explicar su “plan de calidad democrática” a Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

En concreto, el líder del Ejecutivo ha marcado una hoja de ruta que pase por favorecer la protección de la prensa libre e independiente en cuyo relato ha incluido a la persona de máxima confianza de la responsable de Sol.

En detalle, el líder de Moncloa ha destacado que las medidas abordadas y para las que hablará durante los próximos días con los diferentes grupos parlamentarios apuestan por la transparencia y la independencia de la prensa, y que va en contra del ejercicio periodístico impuesto “a golpe de talonario” o de amenazas. Ha sido aquí cuando el presidente del gobierno ha recordado a MAR y sus palabras contra elDiario.es, a quien amenazó con “triturar” y le advirtió que “iban a tener que cerrar”. “No sé si el jefe de gabinete de algún presidente autonómico se dará por aludido”, ha dicho con un toque de sorna pero hablando muy en serio a su vez Pedro Sánchez.

100 millones de euros para la digitalización de los medios de comunicación

En la práctica, el líder del Ejecutivo ha anunciado, entre otras cuestiones, la puesta en marcha de 100 millones de euros para la digitalización de los medios. Pero esto va dentro de un paquete de medidas e ideas que abogan por la “transparencia” y la “libertad” de los medios, y en contra de las imposiciones.

El responsable de Moncloa ha dejado claro que siempre se puede discrepar, pero nunca faltar al respeta ni ver mermado el derecho al honor: “La pluralidad nos gusta. De hecho, hemos luchado durante años para tenerla mientras otras fuerzas se encontraban muy cómodas en su defensa. El problema no es la discrepancia, ni la crítica, sino la mentira, el ataque a las democracias con argumentos manipulados y cuando esas mentiras se vierten a la opinión pública hasta el punto de diferenciarlas de la verdad”.

El problema no es la discrepancia, sino la crítica

Sánchez ha dejado claro lo necesario que es la “protección de los medios” y la diversidad de opiniones, siempre desde un punto de vista positivo para el conjunto de la sociedad. “A finales del siglo pasado, España dio una lección admirable al mundo, la de la democracia”, ha recordado; y ahora “la tecnología nos brinda una nueva oportunidad, seamos la vanguardia al implementar las garantías europeas y favorecer el debate plural”, asume el presidente, que espera que se sumen a sus propuestas todo el parlamento.

En este sentido, ha indagado en la postura de la extrema derecha, en contra incluso de los textos europeos también en este sentido. “Espero que alcancemos el acuerdo”, ha dicho, lamentado que la ultraderecha no esté por estas. “Tenemos que defendernos, no de las voces discrepantes, sino de la mentira, la desinformación, los bulos, el fango, difamaciones, etc”, ha emitido.

En contra de todo ello, Sánchez se ha abierto a la “crítica” y es conocedor de que “se cometen errores”. “Es lícito que haya voces que lo señalen y nos ayuden a mejorar (…)”, ha indicado.  

En consecuencia, el Gobierno “no quiere monopolizar” nada, sino contar con el apoyo de todos los grupos parlamentarios. “También vamos a hablar con miembros de la sociedad civil (…) Espero de corazón que entendamos que las medidas son objetivas, solventes y necesarias para que todos los que creemos en el estado de derecho y la democracia los mantengamos como hasta ahora”, ha dicho. “La democracia es la victoria de la gente frente a las élites, y la democracia, por tanto, tiene el derecho a defenderse de la desinformación, los bulos y las injerencias”, ha acentuado.