En los últimos años, el juez Manuel García Castellón se ha granjeado un sinfín de antipatías. Los motivos son múltiples y variados, pero pocos han sabido resumirlo en tan poco tiempo como el portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián. Con un vídeo de menos de un minuto de la semana pasada, que se ha vuelto viral en las últimas horas, tras el varapalo de la Audiencia Nacional que ha obligado al juez a archivar su intento de acusar de terrorismo a Carles Puigdemont y Marta Rovira en el caso Tsunami.
“Salvó a Cospedal de la Kitchen, a Esperanza Aguirre de la Púnica… sacó a Ignacio González de la cárcel, salvó o archivó las causas contra el Rey… aún no sabe quién es M. Rajoy… dijo que Marta Rovira era terrorista, o había hecho terrorismo por una manifestación…”. Es el resumen exprés que hizo Rufián en el Congreso en el último pleno, cuando se discutía la renovación del Consejo General del Poder Judicial pactada entre el Partido Popular y el PSOE. Un momento captado en vídeo y que en TikTok acumula miles de Me Gusta y comentarios.
El último dato mencionado, el de Marta Rovira, es el que ha vuelto a poner en el candelero al juez Manuel García Castellón, después de que la Audiencia Nacional haya cerrado toda la investigación de los últimos tres años del Caso Tsunami porque la petición de la ampliación de la investigación se realizó 24 horas fuera del plazo legal. Algo tras lo que Marta Rovira ya ha anunciado que volverá a España, tras estar alojada en Suiza para evitar la extradición.
Sin embargo, han sido muchas las actuaciones del juez García Castellón en casos de relevancia política desde que volviese a su plaza de la Audiencia Nacional durante la época del Gobierno de Rajoy. Un movimiento que en su día fue llamativo, porque renunció al cotizado y bien pagado puesto de juez de enlace en un destino codiciado como el de Roma para ocuparse de su antigua plaza, plagada de casos con mucha carga de trabajo, pero sobre todo con mucha carga política.
Su papel en el caso Púnica, uno de los mayores casos de corrupción de España que afectaban al Partido Popular, o en el caso Kitchen, que investiga la creación de una brigada parapolicial por el Gobierno de Rajoy para espiar a rivales políticos, son algunas de las referencias que hizo Rufián en su intervención.
Y añadió otra, que molestó a la bancada popular: “Hace canutazos a Televisión Española”. Se refiere a un hecho inédito ocurrió hace unas semanas, a finales de junio, cuando la Justicia suiza se negó a dar documentación de Marta Rovira al juez al no ver ningún delito de terrorismo en su actuación. Normalmente, de los jueces en España no se sabe ni su tono de voz, por su habitual discreción y no prodigarse ante los medios.
Pero García Castellón decidió dar atender a los micrófonos de los periodistas en un acto para defender su investigación de terrorismo, pese al toque de atención de Suiza. Algo que provocó la sorpresa incluso de la presentadora del Telediario de La 1 cuando emitió el momento: "No es habitual que un juez haga declaraciones, pero, hoy, el magistrado de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, ha atendido a los medios".
La crítica de Rufián a este momento provocó el enfado de una diputada del PP, que espetó al portavoz de ERC un sonoro “¿Y?”. “¿Y si fuera de izquierda? ¿Le daría igual? Yo creo que no. El único problema que hay en este país es cuando los jueces no son suyos”, concluyó Rufián.