El presidente valenciano, Alberto Fabra, junto a Mariano Rajoy y Rita Barberá. EFE



Vuelven las pugnas por el poder en el PP valenciano, que recuerdan el pulso tras la caída de Francisco Camps, cuando sus más fieles se juntaron para hacerle poco llevadera la vida a Alberto Fabra. Ahora, sin estar curadas del todo aquellas heridas, la vieja guardia, con Alfonso Rus y Rita Barberá a la cabeza, que ya han dicho que no apoyarán la candidatura de Fabra a la reelección, salvo que Génova lo ordene.

Cospedal dice que decidirán los sondeos internos
La caja de los truenos la abrió María Dolores de Cospedal al dejar a los pies de los caballos a Fabra con su anuncio de que la dirección nacional del partido está valorando varias opciones de candidatos del PP a la Generalitat y que serán los sondeos que están encargando los que decidirán.

La recogida de firmas encargada a Isabel Boning
Ante tal anuncio, los de Fabra, desde la Generalitat han impulsado una iniciativa para buscar apoyos al president con los que mantener un pulso con Madrid. Según adelantó Levante, Fabra encargó a la coordinadora general del PP valenciano, Isabel Boning, una recogida de firmas. Y en la elección de Boning hay, según publica el diario local, gato encerrado: una maniobra inteligente de Fabra para neutralizar a la consejera de Infraestructuras y número dos de la formación, una de las mejor posicionadas para sustituirle.

Rus dice que el candidato lo nombra Madrid
Boning inició la recogida de firmas de apoyo a la candidatura de Fabra, pero se dio contra el primer muro, Alfonso Rus, presidente del PP provincial en Valencia y uno de los que más se resistieron al poder de Fabra cuando sustituyó a Camps. Rus empezó diciendo que tenía que leer con detenimiento el manifiesto que le mostraba Boning y luego, “lo firmaré o no”, y a continuación ha dado indicios de por dónde irán los tiros al añadir que el candidato “lo nombra Madrid”.

Pide a Fabra primarias
Rus fue más allá y retó a Fabra a convocar primarias, “para nosotros decidir quién o cómo” y así “lo tendríamos claro”. Sobre la labor del president, el histórico dirigente popular optó por lanzarle un dardo envenenado: “Ha sido una labor durante estos años muy compleja, complicada, porque es más fácil crear que cerrar”, en referencia a Canal Nou.

Rita Barberá y Císcar tampoco firman
Lo mismo que Rus, la alcaldesa valenciana, Rita Barberá ha optado por esperar movimientos de Madrid; lo mismo que el presidente provincial del PP de Alicante, José Císcar, vicepresidente de la Generalitat.

La negativa de Rus y Císcar a apoyar a Fabra, al parecer, tiene más que ver con intereses políticos propios que por razones de disciplina ante la dirección nacional. Los dos líderes provinciales estarían molestos por su defensa de desligar cargos del partido con el de presidente de la Diputación, para frenar la acumulación de poder. De hecho, Fabra no apoyó a Císcar en su aspiración de presidir la Diputación de Alicante. Algo que podría no perdonarle ahora su número dos en el Consell.