“Estas reglas del juego no son del PP, siempre vamos a estar en contra de declarar 'personas non gratas', de los señalamientos y de cordones sanitarios […] Es una herramienta deleznable de la izquierda […] No podemos estar más en contra de la declaración de persona non grata, muchas veces hemos sido nosotros las propias víctimas, lo hemos sufrido de forma totalitaria”. De esta forma criticaba este domingo la la presidenta del Comité de Derechos y Garantías del PP, Andrea Levy, la decisión de la Asamblea de Ceuta de declarar persona ‘non grata’ al líder de Vox, Santiago Abascal.
Una declaración que precisamente la Asamblea de Ceuta conseguía sacar adelante gracias a la abstención de los populares, lo que provocaba un enfado mayúsculo en las filas de la formación ultra, que amenazaban con romper la alianza a nivel nacional con los de Pablo Casado. “El PP colabora en la campaña de demonización de Vox. Una campaña que produce violencia contra nosotros, nuestros simpatizantes y nuestras familias. Al mismo tiempo pretende nuestro apoyo para sus iniciativas en varios parlamentos. O una cosa o la otra. Las dos no van a poder ser”, amenazaba este viernes Abascal a través de las redes sociales.
Una amenaza que, unido a que este lunes Vox anunciaba que rompía relaciones con el PP, ha provocado que la dirección nacional de Génova, 13 se haya intentado distanciar de la decisión de su filial en Ceuta, pese a que estos se han reafirmado. “Fue una decisión responsable porque no estoy a favor de los cordones sanitarios, pero aquí el cordón sanitario lo ha establecido Vox, no es una cuestión de izquierdas ni de derechas”, ha defendido el presidente de Ceuta, el popular Juan Jesús Vivas, a la Cope. “Vox incendia esta ciudad”, ha añadido.
Todas las veces que el PP quiso declarar persona ‘non grata’ a alguien
Por otra parte, pese a la movilización de toda la dirección nacional del PP, lo cierto es que los populares han intentado en reiteradas ocasiones declarar persona ‘non grata’ a diferentes políticos de otros signos.
Sin ir más lejos, el 23 de mayo de este mismo año, el PP reclamó declarar en Toledo persona non grata al alcalde socialista de Palma de Mallorca, el sociailista José Hila, por eliminar la calle Toledo de su callejero. Dos años antes, el PP de Pontevedra pedía hacer lo mismo con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por un supuesto “ninguneo” a la provincia en los Presupuestos Generales del Estado de ese año. Asimismo, el PP de Pontevedra también pidió en el año 2010 hacer lo mismo con José Luis Rodríguez Zapatero –el tema no salió adelante-.
También en Galicia, aunque en esta ocasión en Vigo, el Ayuntamiento de la ciudad declaró en 2013 al entonces comisario europeo de la Competencia, Joaquín Almunia, persona non grata, e incluso llegó a enviar una carta a la Comisión Europea, pidiéndoles hacer lo mismo.
Asimismo, entre otros ejemplos, en el año 2015 el PP de Zaragoza pidió declarar persona non grata al actor Willy Toledo por unos comentarios realizados sobre la patrona de la ciudad, la Virgen del Pilar, y la Fiesta Nacional.
Ciudadanos tampoco se queda atrás
Por otra parte, este domingo la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, también criticaba la decisión de la Asamblea de Ceuta. “Rechazamos absolutamente este señalamiento contra Santiago Abascal. Es una práctica idéntica a las empleadas por los nacionalistas para atacarnos a los constitucionalistas. Es inadmisible”, tuiteaba la líder naranja.
No obstante, Ciudadanos en su pasado también ha participado en este tipo de medidas. Por ejemplo, en mayo de 2016 el Pleno del Ayuntamiento de Tres Cantos (Madrid) aprobaba declarar a Arnaldo Otegi persona ‘non grata’ en el municipio, con los votos favorables de PP y Cs y la abstención del PSOE.
Un Otegi que un año después siguió los mismos pasos en Atarfe (Granada), aunque en esta ocasión los socialistas se aliaron junto a PP y Ciudadanos para votar a favor. Por último, en el año 2015 los naranjas se abstuvieron en una votación para declarar persona non grata a Leopoldo Bernabeu, en ese momento concejal de Cs por Benidorm (Alicante), por un presunto acoso y supuestamente amenazar con arma blanca a personas próximas a su anterior entorno laboral.