El batacazo del Partido Popular en las elecciones ha obligado al PP a reaccionar. El pasado martes, Pablo Casado quiso marcar distancias con Vox y lo calificó, por primera vez, como partido de extrema derecha. Sin embargo, los populares andaluces, encabezados por Juanma Moreno, se desmarcan de la estrategia del líder de la formación para cuidar el pacto que le llevó hasta la Junta de Andalucía.

Vox es un aliado, un partido serio con el que se puede hablar”, indicó el consejero de Presidencia del Gobierno andaluz y presidente del PP de Málaga, Elías Bendodo. Unas declaraciones que tuvieron lugar tan sólo dos días después de la nueva definición que Pablo Casado otorgó a Vox.

El presidente del Partido Popular, tras dar un volantazo a la derecha, quiere dar otro hacia el centro para enmendar lo ocurrido el 28 de abril de cara a los comicios municipales y autonómicos de mayo. Pero este deseo se contrapone al del PP de Andalucía, que necesita a Vox para preservar su gobierno con Ciudadanos.

Los populares en Andalucía comenzarán una ronda de contactos para presentar el borrador de los Presupuestos de 2019. “El Gobierno andaluz es imparable y está sustentado en tres patas”, aseguró Bendodo en clara alusión al tripartido de derechas y haciendo un guiño a la formación de ultraderecha.

En este sentido, Bendodo ha señalado que todo lo demás pertenece a la “excitación” propia de las campañas electorales, aludiendo a la nueva estrategia instaurada en Génova. Vox amenazó que no negociaría nada hasta que Pablo Casado se disculpe por haberlos calificado como “ultraderecha”.

Sin embargo, la fuerza de extrema derecha sí dio su apoyo a un decreto-ley que supondrá una reforma fiscal en Andalucía – supresión del impuesto de sucesiones y rebajas en el IRPF – propuesta por Ciudadanos y PP.

El apoyo de Vox desembocó en un nuevo guiño del Ejecutivo. “Ni Génova ni Nueva York, lo primero es el Gobierno andaluz”, señalaban desde San Telmo. Eso sí, también admitieron que su aspiración es “tener siempre un pie en el centro y el otro a derecha e izquierda”.

Bendodo sostuvo que “Andalucía no se puede permitir el lujo de caer en la inestabilidad”. Definió a Vox como “un partido legítimo” con el que tienen un acuerdo de investidura con 37 medidas que está “plenamente vigente” y, asegura, que se cumplirá al “cien por cien”.