La infanta Cristina. EFE/Archivo



La infanta Cristina no sólo firmó como arrendadora y arrendataria de su propio palacete de Pedralbes, sino que emitió cada mes facturas para cobrar de Aizoon el fraudeulento alquiler. Una maniobra para apropiarse de dinero público desviado a la empresa que comparte con su marido, Iñaki Urdangarin, desde el Instituto Nóos, la fundación que presidió el duque de Palma y que consiguió millonarios contratos de los gobiernos del PP en Valencia y Baleares. Tanto su firma en el contrato de alquiler como las facturas desmontan el argumento de que la hija del Rey era ajena a las actividades de su marido en el entramado Nóos.

Nombre y NIF de la infanta
La infanta Cristina emitió decenas de facturas con su nombre y su NIF, 00.000.014-Z, a Aizoon con el importe del alquiler de su propia vivienda en el exclusivo palacete de Pedralbes, supuestamente para ser usado como despacho profesional de Aizoon, una empresa sin actividad real, informa El Mundo.

El dinero terminó en la cuenta bancaria del matrimonio
Según los investigadores de Hacienda, la operación fue ideada con el objetivo de generar gastos falsos para pagar menos impuestos y, al mismo tiempo, desviarse fondos de Aizoon. El dinero desviado de esta empresa por concepto del autoalquiler acabó, mes a mes, y desde finales de 2005, en una cuenta bancaria que comparten Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin.

Los duques de Palma utilizaron dinero de Aizoon, provenientes de fondos públicos, para pagar múltiples gastos personales, como viajes al extranjero, entre ellos un safari, productos de alimentación, carburantes, libros o fiestas familiares

El argumento de que la infanta no era "consciente"
El juez José Castro, instructor del caso Nóos, deberá decidir si imputa a la hija del Rey por blanqueo de capitales y delito fiscal. La propia Hacienda, que tiene en su poder las demoledoras pruebas, la Abogacia del Estado y la Fiscalía mantienen que no hay indicios suficientes para considerar que la participación de la infanta en Aizoon fuera “consciente” .

En una entrevista el mes pasado, el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, negó que la Fiscalía esté dando "un trato desigual, positivo o negativo de la infanta” Cristina en el caso Nóos y aseguró que los ciudadanos deben estar convencidos de que “si hubiera datos objetivos” para imputarla “no dudaría en formular dicha imputación”. La Fiscalía se ha opuesto a inculpar a la hija del Rey, al entender que “para poder cometer los hechos delictivos que podrían imputársele” requiere “la ejecución de actos” y “no es lo mismo participar en un acto que tener noticia de un acto o beneficiarse de algo si ese beneficio no está previsto por la ley”.