Mientras el Gobierno no se cansa de pregonar que la crisis ha terminado y que la recuperación ya está aquí, hay datos tozudos que desmienten la propaganda oficial: el paro sigue en el 25%, el segundo más alto de Europa, el número de ejecuciones hipotecarias se disparó en 2013 y España, por primera vez desde la guerra civil, pierde población. No hay datos oficiales exactos porque el padrón se actualiza cada dos años, pero aún así los datos del Instituto Oficial de Estadística (INE) son más que preocupantes.
Muchos más de los que dice el padrón
En España solo hay un método para calcular la población, el padrón de habitantes, y es lo que utiliza el INE. Sin embargo no refleja cifras reales del éxodo, tanto de inmigrantes como de españoles que se van, porque muchos inmigrantes no están inscritos en el censo y sobre todo porque quienes se marchan no se toman la molestia de borrarse. Aún así los datos son muy preocupantes. El primer año de Gobierno de Rajoy pasará a la historia por ser el primero en el que España perdió población y entre 2012 y 2013 las estadísticas dicen que se fueron más de medio millón de personas, 547.890 personas para ser exactos, y a esa cifra hay que sumar 230.581 extranjeros nacionalizados españoles. Los inmigrantes comenzaron a irse en 2010, aún así el saldo neto de la población en España siguió creciendo hasta 2012. Entre ese año y 2013 se calcula que un millón de inmigrantes se han ido ante la falta de trabajo en España.
Y los españoles vuelven a emigrar
Una de las consecuencias sociológicas más de fondo de esta crisis es que los españoles vuelven a emigrar, como en la década de los 60 del siglo pasado, en busca de trabajo y una vida mejor. Tampoco hay datos actualizados, pero el INE apunta a que durante 2012 se fueron 50.000 y casi 80.000 durante 2013. Los españoles que se van son jóvenes cualificados que buscan un trabajo en lo que sea o familias enteras, con padres de mediana edad, a los que se les ofrece un trabajo mejor remunerado en Alemania, Reino Unido, Perú, Chile u otros países latinoamericanos. Se van ingenieros, economistas, informáticos, profesores, médicos.... porque aquí solo hay trabajo temporal para camareros, peones agrícolas o limpiadoras.
Éxodo de ciudadanos europeos
Según los datos del INE en términos absolutos quienes más se han marchado de España son los rumanos (69.669), seguidos por los marroquíes (52.483). Les siguen los ecuatorianos, colombianos y bolivianos porque además sus respectivos países están creciendo, especialmente Ecuador.
La población alemana residente en España se ha reducido en un 24% entre 2012 y 2013 y la francesa un 12,7%. Los ayuntamientos de la Costa del Sol o de la costa alicantina saben bien lo que está ocurriendo, así por ejemplo el ayuntamiento de Torrevieja ha perdido 15.000 residentes solo en 2013.
Se van los jubilados europeos
Pero hay otro fenómeno preocupante, los jubilados europeos que compraron casa en la costa española está regresando a sus países. De los casi 600.000 extranjeros que se borraron del padrón el año pasado, la mayoría eran ciudadanos comunitarios según el INE. Si se excluye a rumanos y búlgaros, que no responden al perfil de jubilado europeo que viene a España por la calidad de vida, 219.225 ciudadanos europeos se borraron del padrón el año pasado.
Alemanes, franceses e ingleses de edad elevada se van o piensan irse por muchas razones, la primera porque el Gobierno español les obliga ahora a declarar sus bienes en el extranjero y tienen miedo a que les haga pagar más impuestos, la segunda porque muchos están solos y tienen problemas de salud y movilidad y las residencias españolas les resultan demasiado caras. Los jubilados europeos se van porque su pensión ya no les cunde tanto y porque España ya no ofrece los mismos servicios que antes. Y porque les ha contagiado el pesimismo, ellos piensan que las cosas aquí no van a mejorar.
Muchos más de los que dice el padrón
En España solo hay un método para calcular la población, el padrón de habitantes, y es lo que utiliza el INE. Sin embargo no refleja cifras reales del éxodo, tanto de inmigrantes como de españoles que se van, porque muchos inmigrantes no están inscritos en el censo y sobre todo porque quienes se marchan no se toman la molestia de borrarse. Aún así los datos son muy preocupantes. El primer año de Gobierno de Rajoy pasará a la historia por ser el primero en el que España perdió población y entre 2012 y 2013 las estadísticas dicen que se fueron más de medio millón de personas, 547.890 personas para ser exactos, y a esa cifra hay que sumar 230.581 extranjeros nacionalizados españoles. Los inmigrantes comenzaron a irse en 2010, aún así el saldo neto de la población en España siguió creciendo hasta 2012. Entre ese año y 2013 se calcula que un millón de inmigrantes se han ido ante la falta de trabajo en España.
Y los españoles vuelven a emigrar
Una de las consecuencias sociológicas más de fondo de esta crisis es que los españoles vuelven a emigrar, como en la década de los 60 del siglo pasado, en busca de trabajo y una vida mejor. Tampoco hay datos actualizados, pero el INE apunta a que durante 2012 se fueron 50.000 y casi 80.000 durante 2013. Los españoles que se van son jóvenes cualificados que buscan un trabajo en lo que sea o familias enteras, con padres de mediana edad, a los que se les ofrece un trabajo mejor remunerado en Alemania, Reino Unido, Perú, Chile u otros países latinoamericanos. Se van ingenieros, economistas, informáticos, profesores, médicos.... porque aquí solo hay trabajo temporal para camareros, peones agrícolas o limpiadoras.
Éxodo de ciudadanos europeos
Según los datos del INE en términos absolutos quienes más se han marchado de España son los rumanos (69.669), seguidos por los marroquíes (52.483). Les siguen los ecuatorianos, colombianos y bolivianos porque además sus respectivos países están creciendo, especialmente Ecuador.
La población alemana residente en España se ha reducido en un 24% entre 2012 y 2013 y la francesa un 12,7%. Los ayuntamientos de la Costa del Sol o de la costa alicantina saben bien lo que está ocurriendo, así por ejemplo el ayuntamiento de Torrevieja ha perdido 15.000 residentes solo en 2013.
Se van los jubilados europeos
Pero hay otro fenómeno preocupante, los jubilados europeos que compraron casa en la costa española está regresando a sus países. De los casi 600.000 extranjeros que se borraron del padrón el año pasado, la mayoría eran ciudadanos comunitarios según el INE. Si se excluye a rumanos y búlgaros, que no responden al perfil de jubilado europeo que viene a España por la calidad de vida, 219.225 ciudadanos europeos se borraron del padrón el año pasado.
Alemanes, franceses e ingleses de edad elevada se van o piensan irse por muchas razones, la primera porque el Gobierno español les obliga ahora a declarar sus bienes en el extranjero y tienen miedo a que les haga pagar más impuestos, la segunda porque muchos están solos y tienen problemas de salud y movilidad y las residencias españolas les resultan demasiado caras. Los jubilados europeos se van porque su pensión ya no les cunde tanto y porque España ya no ofrece los mismos servicios que antes. Y porque les ha contagiado el pesimismo, ellos piensan que las cosas aquí no van a mejorar.