“No podemos estar tranquilos, ni apoyar al presidente del Gobierno, cuando vemos a Mariano Rajoy jugar a la ruleta rusa de unas elecciones regionales”, afirma este sábado Federico Jiménez Losantos en un durísimo artículo de opinión contra Mariano Rajoy.

El director de ‘Libertad Digital’ lamenta que las urnas sean la respuesta del Gobierno a “un golpe de Estado”. En su opinión, “Rajoy ha vendido, por no decir regalado, la soberanía nacional, sobre la que descansa la continuidad de la Nación, la fortaleza del Estado y la paz civil de todos los españoles, a cambio de su tranquilidad personal por un par de meses, el tiempo de llegar al sorteo de la Lotería nacional”.

“Rajoy se quedaría más tranquilo, definitivamente tranquilo, dimitiendo, aunque de hecho, ya haya dimitido, sin que sepamos cuándo aunque empecemos a sospechar por qué. El Gordo ya le ha tocado al separatismo catalán. Los españoles, abandonados por nuestros representantes políticos, apenas podemos aspirar a la pedrea”, sostiene Federido Jiménez Losantos.

“¿Elecciones sin detenciones?”
En esta misma línea también se pronuncia Javier Somalo. El periodista de EsRadio carga contra las medidas adoptadas por el Gobierno de Mariano Rajoy en un artículo titulado “¿Elecciones sin detenciones?”.

“Jamás se repetirá una situación como la actual: Europa convencida y con algunos envidiables episodios de firmeza como el de Tajani, la prensa progre internacional pidiendo perdón por algunos de sus excesos, el 155 presentado en sociedad y aclamado, el pueblo volcado y huyendo de viejos complejos, el Rey en un extraordinario momento y el populismo vencido por sus contradicciones. ¿Se podía pedir más? Sí. Que restaurar el orden constitucional no significara volver a la situación anterior a este viernes de consumación de un golpe de Estado”, opina Somalo.

Rajoy y la lotería
Por su parte, el director de ‘El Español’, Pedro J. Ramírez, sostiene que “Rajoy se juega Cataluña en la Lotería de Navidad”. En este misma línea, desde su periódico se afirma que el Gobierno del Partido Popular “huye hacia delante dando a los golpistas otra oportunidad en las urnas”. 

Algo que se critica con dureza desde ‘El Español’: “Rajoy se equivoca y trivializa la democracia cuando para restituir la legalidad quebrantada en Cataluña, en lugar de desarticular la trama golpista se saca de la chistera una convocatoria electoral. No sólo es una muestra de debilidad -la prueba de que desconfía de su capacidad para tomar el control de la Generalitat-, sino que crea un mal precedente. Y además da la posibilidad a quienes han atentado alevosamente contra nuestra democracia de ganar unas elecciones en las que juegan con cartas marcadas: con unos medios de comunicación y una Administración hecha a su medida. Por lo tanto, no es descabellado que pudieran ganarlas, circunstancia que  agravaría aún más el conflicto”.

“Tanta pena de España”
En el diario ‘ABC’ también tienen presencia artículos en los que se cuestiona la gestión del gobierno del Partido Popular respecto a la crisis catalana. Sin ir más lejos, el periodista Jaime González afirma en el diario monárquico que el artículo 155 de la Constitución “debió aplicarse mucho antes es una evidencia empírica a tenor de como se han sucedido los acontecimientos”.

 

Además, apunta que “si el Ejecutivo alumbró alguna vez la idea de que al independentismo se le podía frenar dejando pudrir la situación, se equivocó de cabo a rabo”. Y es que en su opinión, “todo lo ocurrido es consecuencia de la falta de reacción para demoler, en tiempo y forma, las estructuras sobre las que el independentismo levantó el procés”.

“Porque lo de ayer no es más que la guinda (amarga) de un plan de ruptura constitucional que empezó hace mucho tiempo sin que el Gobierno hiciera gran cosa por evitarlo, amén de las recurrentes apelaciones a la unidad nacional. Que el artículo 155 de la Constitución debió aplicarse mucho antes es una evidencia empírica a tenor de como se han sucedido los acontecimientos. Llega tarde, lo que dificultará enormemente la vuelta al orden constitucional en Cataluña. Porque no es lo mismo prevenir que curar. A ver quién le pone ahora el cascabel al gato. Ese es el problema: que el gato ha crecido, ha afilado sus uñas y se ha hecho fuerte entre una masa de gente dispuesta a protegerle. Porque el independentismo ya no es un gato, sino un monstruo de siete colas. Tanto tiempo perdido, tanta ‘proporcionalidad, tanta mandanga. Tanta pena de España”, concluye González en el ‘ABC’.