Los servicios de emergencia trabajan junto a las vías tras el accidente del tren Alvia que cubría la ruta entre Madrid y Ferrol y que descarriló cuando ya estaba muy cerca de Santiago de Compostela. EFE

 

 


El titular del juzgado de instrucción número tres de Santiago, Luís Aláez, que lleva el caso del trágico accidente ocurrido el 24 de julio, ha  imputado al responsable o responsables de seguridad de Adif en el tramo ferroviario siniestrado, entre Ourense y Santiago.

Señala la "omisión de medidas de seguridad preventivas"
En un auto hecho público esta mañana, el magistrado apunta que señalará la fecha de la citación como imputados a estos responsables una vez que Adif informe sobre la identidad de tales personas, y señala que aunque las causas del descarrilameinto del tren “se encuentran obviamente conectadas con la conducción inadecuada por exceso de velociadad” del maquinista, “un examen más detenido de las circunstancias conocidas en que se produce el sinientro permite inferir también su conexión con la omisión de medidas de seguridad preventivas de naturaleza vial”.

Pide las declaraciones de Pastor y los presidentes de Renfe y Adif en el Congreso
El juez reclama, además, a Adif y a Renfe detallados informes sobre las medidas de seguridad, señalización y límites de velocidad en las vías, así como de los protocolos de actuación de las compañías y de las personas responsables de cada una de estas cuestiones. También envía un oficio al presidente del Congreso de los Diputados, Jesús Posada, para que le envíe las actas de las comparecencias la semana pasada en la Cámara de la ministra de Fomento, Ana Pastor, y los presidentes de Renfe, Julio Gómez Pomar, y Adif, Gonzalo Ferre.

El 8 de agosto, los presidentes de Renfe y Adif, Julio Gómez Pomar y Gonzalo Ferré, comparecieron ante la Comisión de Fomento del Congreso de los Diputados para dar explicaciones sobre el accidente, de cuya responsabilidad se demarcaron.

Adif pasó la pelota a Fomento
El responsable de Adif, Gonzalo Ferré, declaró que “el trazado original de alta velocidad contemplaba en su inicio un ancho de vía UCI – el internacional que usan los AVE -, pero que el 10 de junio de 2010 los responsables de Adif, con el visto bueno del secretario de Estado de Infraestructuras y del ministerio de Fomento, se decidió instalar el ancho ibérico para su posterior transformación al ancho internacional alegando que se perdía mucho tiempo con los intercambiadores de vías en Ourense y en Santiago”.

Renfe también eludió cualquier responsabilidad
Por su parte, el responsable de Renfe, Gonzalo Ferré, dijo que para el trazado para la línea de AVE en Galicia se contemplaron tres alternativas y todas ellas incluían la curva de Angrois, en la que se produjo el descarrilamiento, apuntando a los responsables del proyecto de trazado, y añadió que “la transición entre el sistema ERMTS con velocidad permitida de 200 kilómetros a la hora, y el sistema ASFA, con la limitación a los 80 kilómetros a la hora existente antes de la curva, se produce durante cuatro kilómetros, suficiente para llevar a cabo la transición”. El sistema ASFA solo frena el tren si circula a más de 200 kilómetros por hora, que no fue el caso del tren accidentado, que iba a 192 km/h.